𝐒𝐓𝐑𝐈𝐏𝐏𝐄𝐑 | 𝐉𝐉𝐊

4.1

Era el quinto suspiro que soltaba estando en la cocina mientras preparaba un poco de té para mi invitada y para mi.

Técnicamente, luego de haberle dicho eso, no dijo más y simplemente se resignó a caminar hasta uno de los sillones de la sala. Apoyó el bolso que traía consigo a un lado de su cuerpo, y dirigió la neutra mirada que poseía en su rostro en algún punto del ambiente, fundida en miles de pensamientos que seguro pasaban por su cabeza y dándose una idea de  qué situación podría ser la puesta en escena.

Así que, simplemente tomé la decisión de dejarla allí, mientras preparaba algo que nos calentara la garganta y también, mientras procesaba algún tipo de comienzo para nuestra plática; porque sí, había dicho todo con soltura pero sin tener un fundamento con el cual continuar a hablar luego, sin siquiera tener algún tipo de espacio interferido en el cual deba buscar palabras.

⎯⎯ ¿Puedo estar aquí? ¿contigo? ⎯⎯ su repentina voz hace que me de la vuelta para observarla. Tenía un semblante suave y pequeños brillos en sus ojos que me digan que había llorado o estaba a punto de hacerlo ⎯⎯ resulta que tu sala es un poco fría ⎯⎯ sonrió leve, con cansancio.

⎯⎯ Claro ⎯⎯ respondo acompañado de una sonrisa cálida para permitirle el ingreso. Giro sobre mis talones en una intención de volver a mi acción anterior; pero vuelvo a ser interrumpido ante el toque de unas calientes manos que son apoyadas en mi espalda, deslizándose hacia los costados e introduciéndose bajo mis brazos para pasar por delante, donde se posan suavemente sobre mi pecho en busca de confort; aunque sinceramente, además de tristeza, también sentía tensión muscular por mis hombros y brazos, una que no había sentido durante el tiempo en que ella me tocaba y eso me pareció realmente extraño, quizás por la situación en que estábamos o porque este era el fin de todo.

⎯⎯ No me apartes, por favor ⎯⎯ siento su aliento en mi nuca a lo que fue inevitable que la piel se me erizara transmitiéndome miles de escalofríos por mi espina dorsal.

Genial, Light Headed de Kina, cøzybøy, llega resonando desde mi habitación ya que aún no había apagado el equipo de música desde que llegó. Dando así, un ambiente sumamente oscuro y deprimente, tal como se debe sentir ella en estos momentos.

Su voz había sonado quebradiza, suplicante, casi en un susurro que salió al aire como pudo si es que las lágrimas no le ganaban primero.

»⎯⎯ Sé que terminarás conmigo, lo presiento ⎯⎯ volvió a hablar.

⎯⎯ Ji-hyo ⎯⎯ sostengo sus manos que aún yacían sobre mi torso para poder girar y así finalmente verla a los ojos, aunque mi corazón se estrujó ferozmente en cuento mis pupilas, captaron la cruda imagen de sus mejillas humedecidas a causa de mi persona ⎯⎯ sabes que a esto lo hago por nuestro bien, esta relación terminará peor si continuamos así ⎯⎯ coloco mis manos en sus mejillas, tratando de limpiar sus lágrimas con mis pulgares ⎯⎯ y creo que también sabes, que esto no va más allá de hacer el amor o discutir... siempre es pelea tras pelea, además de que nuestro orgullo es superior al del otro por lo que, pasan días sin dirigirnos la palabra. Y cuando, nos reconciliamos, sólo es sexo, sin disculpas. Nuestros sentimientos ya no son los mismos, Hyo.

⎯⎯Yo te sigo amando ⎯⎯ susurró bajando aún más el volumen de su voz; sentí fallecer bajo su mirada latente ⎯⎯ y, siento, el no haber hecho las cosas bien, siento no haber sido la novia que quizás esperabas tener ⎯⎯ dicho aquello último, una lágrima de deslizó entre medio de sus largas pestañas inferiores, hasta cruzar por encima de mi pulgar que aún seguía ahí. 

⎯⎯ Lo fuiste, créeme que fuiste la novia que esperé ⎯⎯ sonrío melancólico ⎯⎯ pero las cosas dejaron de funcionar hace tiempo, ambos somos culpables de ello por no saberlo llevar como correspondía. Lamento no hacerte feliz ahora, ni en el futuro, eres una chica esplendorosa que sé que encontrarás a alguien que valga la pena.

⎯⎯ No lo digas por favor ⎯⎯ sonrió mientras sorbía su nariz ⎯⎯ no ahora cuando sabemos que me costará mucho superarte, Jungkook ⎯⎯ humedeció su labio inferior mientras que dejaba caer apenas un poco de su cabeza entre mis manos al sentir las caricias que trataba de proporcionarle para hacer de esto menos doloroso ⎯⎯ porque... el primer novio no se olvida del todo, ¿verdad? ⎯⎯ prosiguió divertida; asentí lentamente.

Y como si esto fuera el marco de lo que sería el final de nuestra relación, estrechó sus brazos al rededor de mi cintura en busca de un abrazo. Acción que correspondí sin problema, al acercarla más a mi anatomía mientras apoyaba su mejilla derecha sobre mi pecho.
Apoyo mis manos sobre su espalda, y comienzo a deslizarlas de arriba hacia a bajo procurando que eso le sirva de consuelo ya que aún seguía oyendo sus sollozos junto con los espasmos del llanto.

¿Rompía mi corazón el verla así? Claro que sí.

Yo había sido su primer novio, el primer chico que la invitaba a cenar, a pasear, a ver películas en la sala, verla llorar por equis motivos y acompañarla en lo que me necesitaba. Pero lastimosamente, fue una buena época que duró poco. Quizás ella y yo no éramos compatibles, porque aunque trataba de hacerle vivir las típicas cosas de novios, aún había algo que no se encendía en mi interior.

Algo, que parece haberse activado hace dos semanas atrás.