𝐒𝐓𝐑𝐈𝐏𝐏𝐄𝐑 | 𝐉𝐉𝐊

4.0 • I want to possess you, you want to feel me.

Nunca tomé decisiones difíciles en mi vida, menos las iría a tomar ahora contigo, porque si ya era tuyo sin sentirnos, qué diferencia haría el tocarnos.

Enciendo el equipo de música a un volumen considerado ya que siendo viernes por la tarde, había que respetar a los vecinos de las habitaciones de al lado. Tampoco es como si los fines de semana me enloqueciera y tirara el departamento por la ventana, pero cabe destacar los pequeños detalles para que al menos se den una idea de la burbuja que me rodea en estos momentos.

Música de fondo, No idea de Don Toliver para ser preciso, una pequeña botella de soju, las luces semi apagadas por lo que la luz del ocaso ilumina mi habitación a un temperamento cálido pero solitario, mientras que estoy sentado con las piernas extendidas sobre la cama, y mi espalda completamente apoyada sobre el respaldar de ésta misma aún estando vestido. Ni siquiera me había atrevido a quitarme la camiseta negra de dos talles más grande que la original, ni mis pantalones deportivos del mismo color.

Observo la imagen proveniente de mi ventana a la vez que llevo el pico de la botella para darle un beso al líquido que permanece dentro, y luego observo el espacio vacío que yacía en el colchón a un lado de mi. Tan perfectamente acomodado pero tan frío a la vez que incluso una sensación de incomodidad se apodera de mi corazón.

Tal vez NamJoon tenga razón, y es momento de ser feliz, preocuparme por mi y no tanto en las preferencias del otro. Si Ji-hyo quisiera que yo también estuviera bien, no haría una pelea por cualquier cosa que le proponga, ¿verdad? Y en caso de que no sea de su agrado, discutirlo como los adultos que debemos ser.

Y mis padres.

Ya no era un niño al que debían decirle lo que debía hacer; ¿cómo pude ser tan imbécil de llenar mi cabeza con tonterías como esas? ¿cómo fue que las palabras orgullo e hijo, me cegaron por completo ante la sociedad que me rodeaba? Porque incluso como si fuera un karma, una chica de los suburbios me cautivó, me dejó sin aliento, me causó mucho más que cualquier chica de mi misma índole me pudo dar.

Karma. Eso era. Y el destino junto con la vida, estaban encargándose de que me tragara cada una de las palabras y pensamientos que me había dispuesto a creer a lo largo de mi vida.
Estaba dispuesto a renunciar a todo con tal de estar con ella, no me importaba si mi padre me gritaba en la cara la vergüenza que le daba o que ya no sería su heredero, no me importaba porque mi piel, mis labios, y mi corazón la proclamaban a ella.

Entonces, ¿estoy enamorado de Venus? Sí, absoluptamente; estoy arrastrandome en sus perfectos pies de porcelana reclamando su amor, su atención, quitando mi egocentrismo del típico basura que trata de sobrepasar a otros de bajo nivel económico, me estoy arriesgando aún cuando puedo tener nada a cambio por parte de su persona, aún cuando puedo quedar en la nada misma.

Y es por ese motivo, que había tomado la decisión de llamar a Ji-hyo para terminar con nuestra relación, tal como me lo había aconsejado NamJoon hyung.

No le dije directamente de nuestra ruptura, pero sí que necesitábamos hablar. Seguramente se imagina que tendremos una ronda de sexo como siempre suele pasar cada vez que tratamos de reconciliarnos, pero no esta vez; ya nada será igual.
Sé que quizás terminará lastimada, pero no tanto a comparación del futuro si seguimos en esta nubosidad tóxica y mal desarrollada que nosotros mismos creamos. Y creo por fin, que nunca nos amamos realmente, sólo nos atraíamos físicamente y complacíamos en su momento lo que deseábamos uno del otro.

Así que, ¿qué mejor que darle punto final a un párrafo que sólo contiene puntos suspensivos y frases que no superan los dos renglones?

El sonido del timbre resonando en mi departamento, me volvió a mi hogar.

Bajo los pies de la cama, me coloco rápidamente los zapatos junto con la botella en mi mano que dejo posada en la mesa en cuanto cruzo por la cocina, y me dispongo a abrir la puerta con un semblante serio ya que no quería infundir más ilusiones en la contraria que yacía parada frente a mi.

⎯⎯ ¡Jungkook! ⎯⎯ exclamó eufórica mientras extendía sus brazos hacia mí; fue inevitable procurar que no haga eso, pero sin embargo, fue tanta la fuerza de su agarre que di dos pasos hacia atrás junto con ella sujetada de mi cuello, cierro la puerta en cuanto ingresamos dentro, y trato de quitarla lentamente mientras posiciono mis manos sobre sus hombros ⎯⎯ creí que no volverías a llamarme bebé ⎯⎯ besa mi rostro con notable alegría incluyendo mis labios, acción que no respondo por lo que la alejo en definitiva.

Carajo, esto será difícil.

»⎯⎯ ¿Qué sucede? ¿por qué me quitas?

⎯⎯ No te llamé para follar, Ji-hyo⎯⎯ la observo a los ojos y puedo notar una confusión aproximándose en su cabeza ya que fui demasiado directo con esa palabra. Tal como dije antes, ella y yo definíamos a ese término como reconciliación.

⎯⎯ ¿Qué?

⎯⎯ Te llamé para hablar sobre nosotros. No podemos continuar con esta relación.