Todos sabemos lo difícil que es la atención al público. Jamás traten a quienes los atienden de una manera grosera o altanera por favor.
Era mi primer empleo, mesera de un buen restaurante, con un jefe rudo y cruel, y pocos ayudantes. El día en especial tenía un aire pesado, era mi primer día.
Habían 3 mesas afuera ocupadas; en una estaban unos productores, en la segunda estaba un abogado y en la tercera una señora que había salido a pasear.
Había mucha gente que atender y era difícil recordar todo, cuando atendí a la señora y al abogado tuve problemas, la señora solo tiraba su comida al piso y ordenaba que le trajeran más, el abogado se quejaba de su comida fría que por más que intentara calentarla no podía, después de un largo rato, logré atender a los productores, pero su comida nunca salió, ellos esperando formaron un alboroto por su comida, yo no sabía que hacer y mi jefe me estaba acechando, ellos se fueron enojados y con malas reseñas, eran clientes importantes.
Me encerré en el baño a llorar por mi pésimo desempeño y la mierda de gente que había atendido.