Loba en piel de cordero.

Es mi secreto.

Narra Lyla.

Me desperté en plena noche debido a la sed, tenía la boca seca, aún medio adormilada intenté incorporarme, pero una leve presión en mi cintura me lo impedía. Me froté los ojos intentando adaptarme a la tenue luz de la lamparita de noche mientras parpadeaba repetidas veces.

Por acto reflejo miré a mi cintura y oh claro... no podía levantarme por que unos musculosos brazos me rodeaban. Espera espera... Lyla, despierta ¿QUE? ¿POR QUE UNOS BRAZOS RODEABAN MI MALDITA CINTURA. Contuve un grito cuándo miré a la persona que se encontraba a mi lado.

Loan. Por algún motivo al ver que era él me relajé y suspiré aliviada, me quedé observándolo un momento. Se veía tan tranquilo, tan guapo... demonios Lyla, ¿pero que estas pensando? Él nunca se fijaría en ti, se supone que eres la nerd. (¿Ah, si? Pues está en mi cama, abrazandome, punto para mi estupida conciencia)

Intenté soltarme sin despertarle para ir por agua pero el apretó su agarre y pegó aún más su cuerpo al mío y OH POR DIOS, OH DIOS MIO, ESTÁ... ESTA... OH DIOS... está empalmado y presiona su miembro en mi entrepierna inconscientemente, creo que estoy apunto de enloquecer y huir.

Calma Lyla... calma... es sólo un chico, esto es normal, les suele pasar, no entres en pánico y huyas como una desequilibrada, solo intenta soltarte y ve por la maldita agua antes de que te golpee internamente. Respire hondo y así lo hice. Intente soltarme lo más delicadamente que podía.

Pero eso solo provocaba que él se removiera molesto y aumentara la presión y la fricción de nuestras intimidades, empezaba a mojarme, lo notaba, tenía que despertarle.

-Loan...Loan...despierta.- susurre en su oído.- Loan... vamos... levanta.- empezó a removerse y a frotarse contra mi con más intensidad.- Maldita sea Loan... ¡despierta!.- comenzó a subir sus manos por debajo del camisón del hospital (esos que te ponen sin NADA debajo)- Oh por dios Loan... ¿pretendes matarme?-seguía con las caricias por mi espalda y mis costados mientras se frotaba y gruñía débilmente. Era jodidamente encantador.-Joder Loan ¿pretendes que te viole o algo así?- dije esto un poco más fuerte de lo necesario, Loan abrió los ojos como platos y siendo consciente de lo que estaba pasando se separó bruscamente y calló de la cama. No pude contener mi carcajada.

Me asomé desde el borde de la cama para comprobar si estaba bien. Seguía con los ojos abiertos como platos mientras se frotaba el brazo por el golpe, levantó lentamente sus ojos azules hacia a mi y me envió una sonrisa que fue más bien una mueca. No puede evitar reír de nuevo.

-Oh... esto... yo... Lyla... yo... dormía... ya sabes... yo...- balbuceó mientras se levantaba rojo como un tomate. Yo hice un gesto con la mano quitándole importancia.

-Se un buen chico y tráeme agua ¿sí?- dije intentando cambiar de tema.- Me muero de sed.- él asintió con la cabeza y salió disparado fuera de la habitación. Mordí mi labio conteniendo una sonrisa.

A los pocos minutos Loan volvió con una botella de agua, sus manos temblaban mientras me la tendía. Sonreí dándole las gracias y el volvió s asentir. De repente parecía tener problemas de autismo.
Se sentó en el sillón y respiró profundamente.

-Lyla...- susurró y centré mi atención en él.- ¿vas a contarme lo que te ha pasado?- negué con la cabeza.- vamos Lyla... llevo aquí dos días preocupado, al menos merezco una explicación.- dijo molesto. Resoplé