♡ 𝓯𝓻𝓮𝓮𝓼𝓲𝓪 ; jimin

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Durante todo el trayecto intento comunicarse con ella pero mandaba al buzón eso solo lo ponía más nervioso y frustrado.
Sabía dónde estaba porque ella se lo había dicho horas antes, así que no le fue difícil ubicar la casa de ese amigo, esa donde era la fiesta.
Entró corriendo volviendo a llamarla sin embargo el mismo patrón se repetía.
La llamada entraba pero no contestaba.

Fue difícil caminar entre tantos adolescentes ebrios y bailando, siguió llamando hasta que por fin atendió.
——¿Ji-Jimin?

——¿Dónde estás? ——por instinto y debido a la música alta, subió las escaleras.

——Mi cabeza...

——Dime ¿Dónde-?

No fue necesario la visualizó en una habitación sentada con su cabello despeinado y lágrimas en los ojos.
——¿Qué te pasó?

——Mi novio está allá abajo bebiendo y manoseando a otra tipa. —— sonrió antes de sorber la botella de cerveza ——— Y cuando lo enfrenté el dijo “¡Oh, vamos! Soy tuyo todos los días dejame divertir hoy”

Su llanto apareció otra vez.

——¿Cuántas de estas llevas? ——— vio  su alrededor habían máximo 10 botellas.

——Perdí la cuenta solo sé que bebí y bebí hasta que lo que hizo dejara de doler.

——No creo que eso funcione.

——No, en realidad fue peor porque comenzaste a dolerme tú.

——¿No es muy tarde ya para eso?

——Creí que si salía con alguien que tuviese tus cualidades, creí que así no te extrañaría pero vamos un reemplazó jamás me haría sentir lo que tú.

Él se quedó callado escuchando.

——Ni lo que yo te hice sentir.

——Tú fuiste quien lo decidió así.

——¿Recuerdas lo que éramos? Lo felices que fuimos estando juntos, las risas, los chistes...

——Suficiente.

——Los besos, los todo.

——¡Ya, basta!

Lilly lloró aún más fuerte. ——— Cuando terminamos fue doloroso, borrar todas las fotos como si eso fuese a eliminar lo que hicimos juntos alguna vez.

——¿Y crees que yo la pase bien?

——Parece que todo lo que hago es arruinar lo único bueno que tengo. ——— se cubrió el rostro llorando.

Jimin algo abrumado por su estado se acercó sentándose a su lado.

——Al menos sé que aún te importó.

——Claro que me importas. No soy alguien que guarde rencor.

——No, así no eres tú. ——— ella le miro por unos segundos y le dio una sonrisa entre su llanto.

Bea se empezaba a quedar dormida de llevar tanto tiempo esperando, cabeceó dos veces y la tercera se golpeo con la laptop.
——No creo que se moleste si me voy a dormir... ———bostezo——— Mañana lo veré después de todo.

Fue a cepillarse los dientes mientras bailaba haciendo que su cabello fuese de un lado a otro cuando el timbre de una notificación en su celular la hizo correr pensando que se trataba de su amor.

Pero no era él.

Era Bada.

Extrañada por el mensaje lo abrió viendo una imágen y un audio.