Capítulo 1. Viviendo como antes.

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La calle parecía nunca acabar, desde temprano había salido a jugar fútbol, algunos compañeros de la clase asistieron al juego, las vacaciones eran tomadas como eso, un descanso de todo el ajetreo rutinario.

Ir a la universidad era un martirio, despertar todas las mañanas, atravesar la ciudad a prisas para lograr llegar a tiempo.

Para Can esto era demasiado, pero dadas las circunstancias se había acostumbrado. Ya era costumbre despertar por las mañanas e ir a la universidad, incluso ahora Lay se había unido a su recorrido diario.

Su hermana menor había ingresado a la universidad, pero ella seguía siendo una chica independiente. Sus asuntos eran eso, sus asuntos. Y contra eso Can nada podía hacer.

Pero los tiempos eran buenos, no podía quejarse. Las vacaciones habían llegado, podía aprovechar el tiempo paseando a Gucci, jugando futbol, inclusive durmiendo.

Las vacaciones era la mejor temporada para Can, salvo por un detalle que Lay notó desde hace unos días atrás ¿Dónde está Tin?
Para su sorpresa Can estaba más tranquilo de lo normal, lo cual era raro, Can nunca estaba tranquilo.

Recorría las calles hasta llegar a casa. Al llegar maldijo en secreto, no podía correr el riesgo de ser escuchado por su madre, lo castigará sin duda.

—¿Can? —Lay le llamó desde el sofá —¡Ven… Quisiera charlar!

Can dudó en llegar hasta ella, después de todo, la conocía muy bien, seguramente deseaba algo.

—¡No conozco a los chicos de primer año! —Can respondió apresurado.

—¿Cómo sabes que pediré información sobre ellos? —Lay frunció en ceño.

—¡Hug! —Can dejó escapar un jadeo —Pasas el tiempo emparejado chicos, tus pensamientos son inadecuados.

—Espera… —Lay sacudió su cabeza acomodando sus lentes —Solamente quiero preguntarte algo, no es algo sobre chico, bueno sí pero…

—¡La comida está lista! —La madre de ambos había llegado a ellos —No cocinaré de nuevo ¡lo digo por ti Can!

—¡Ma! —Can se exaltó.

—¡Hug! —Ella respondió con una mueca burlona.

*

Durante el tiempo de la cena Lay y Can se dedicaron a comer sin mediar palabra. Su madre había puesto una nueva regla en la mesa, comer era lo primordial.

Desde que Lay ingresó a la universidad la comida era olvidada por las mañanas. Ambos preferían desayunar en el campus, pero nunca pensaron en los sentimientos de su madre, ella se esmeraba en cocinarles el desayuno.

Logró imponer su autoridad como madre y ponerlos en cintura. Desde ese momento Can y Lay no dejaban nada en el plato.

Pero lejos de eso, seguía siendo la madre amorosa, mejor amiga de Lay y autoridad sobre Can.

—Me alegra que ambos estén ya en la universidad —La madre de ambos pensaba en voz alta —He sido una buena madre.

—Ma... —Lay exclamó atrayendo su atención —¿Crees que fue buena idea ir a la misma universidad que Can? —Lay bromeaba.

—Por supuesto —Su madre le respondía sonriente —Can ha hecho excelentes amistades… Tin por ejemplo.

En ese momento Can subió la mirada mientras Lay se la devolvía, de manera indirecta había logrado que Tin fuera mencionado.

—Ese chico es tan amable, gentil —Can sólo escuchaba a su madre alabar a Tin —Can… ¿Por qué nunca lo invitas a esta casa?

—Ma, Tin siempre viene a esta casa —Lay respondió.

Love By Chance: TinXCan "Extrañándote..." Donde viven las historias. Descúbrelo ahora