Un amor de infancia

95 6 0
                                    

Al fin encontraron una Posada donde instalarse hasta encontrar la guarida donde tendrían retenido a konohamaru.
Las chicas habían cogido una habitación para ellas y los chicos otras todo iba a costa de Mei.

Hahahahaha.. -Suspiro dejándose caer en el suelo despacio la pelirroja.

Sarada por un momento abrió la puerta corredera que daba a un pequeño estanque en un jardín con piedras, se veía bien vuidado, tenía también un trozo de tierra Feng Shui peinado con un rastrillo para quedará bonito.Al rato de descansar se dirigieron a las aguas termales, la pelirroja recogió su largo cabello en un moño, cuando ya entraron a las aguas se quedaron allí un buen rato descansando en remojo.
Los demás hicieron lo mismo, una vez terminaron se fueron al Salón entre las habitaciones, allí les esperaba un gran festín de comida, platillos habituales, dulces ect ect.
Todo el equipo quedó satisfecho,a excepción de Mitsuki que comió la cantidad justa para su estómago o más bien apetito;Al rato Mei y sarada de retiraron a su habitación así preparando los Fuutones extendiendolos por el suelo para dormir, en ese mismo momento cayeron redondas del cansancio.

Flashback

Era mi primer día de colegio por lo que me sentía nerviosa,camine por un extenso pasillo hasta llegar a una de las tantas puertas corredizas que había en el lugar, posee las manos en ella para hacerla a un lado,me decidí a dejar mi timidez a un lado y entre de una vez, el Sensei me miro con una amplia sonrisa y me extendió la mano para que pasara, moví mi cabeza a sintiendo sin decir ninguna palabra al respecto llegando hasta el mirando al frente por lo que el profesor me presente a todos.

Ella es Choumei Yack vuestra nueva compañera. -Dijo con una amplia sonrisa en el rostro. -
Mire a todos y cada uno de ellos pero cuando termine de mirar a todos pose mis orbes verdes en un chico de cabello marrón con una bufanda y una gafas verdes oscura en la cabeza, a su lado se encontraba un chico con gafas y un moco en el rostro.

Eh Udon y si nos escapamos ahora que el sensei iruka no mira. -Sonrió por lo bajo el castaño. -

Mei te puedes sentar allí. -Señalo donde estaba el chico de las gafas. -
Me puse en camino hasta llegar allí, junto a los dos individuos, mencionados antes, por un momento los mire de reojo y el chico de las gafas verdes me miro.
¡Hola, soy Konohamaru! -Sonrió ampliamente señalando se. -

Yo soy Udon. -Su voz sonaba dudosa a la vez que tímida. -
Ee.. Encantada yo soy Choumei. -Sonreí tímidamente moviendo la mano. -

Cof cof... ¡¿A donde querías ir Konohamaru!?-Grito el sensei enfadado. -

A ningún sitio Iruka sensei. -Musito por lo bajo con cara de fastidio. -

Me sentía nerviosa a su lado no se muy bien por qué,el dicho Konohamaru me miro sonriente y un pequeño rubor empezó a subirme por toda la cara, apartando así la mirada de él.

Fin del flashback

Cuando desperté a la mañana siguiente recordé algo, estuve pensando por qué tuve que irme de la aldea al poco tiempo de hacer los exámenes de acceso a chunin, ahí ya no volví a saber de mis queridos amigos y compañeros,oh cierto Koei... querían mi chakra unos tipos raros y luego los Ototsutsuki que según ellos les pertenecía el bijuu de diez colas. Al rato de levantarme de la cama me fui a dar un relajante baño en las aguas termales, se sentía bien, me quedé allí absorta de todo lo que pasaba a mi alrededor hasta que escuche una voz llamarme desde la entrada del vestuario.

¡Mei sensei! -Grito una voz femenina desde la entrada. -

¡Eh! -Volcó la mirada a ver de donde provenía la voz que la había sacado de su ensimismamiento para ver a sarada saludarla con la mano. -

oh Sarada.. -Musito con una sonrisa nerviosa devolviéndole el saludo. -

Al rato se encontraban en un bosque cerca del puerto, Los tres genin andaban unos metros más atrás mientras que Mei tanteando el terreno pensaba en una estrategia,miraba a todos lados pensativa hasta que percibió algo cerca de donde se encontraban.

Esta salto por intuición sin articular alguna palabra, sagrada pego un grito en señal que los esperará pero la peli naranja hizo cosa omiso ante la llamada de la kunoichi.
Al final llegaron a la entrada de una cueva, pues dentro se percibía 6 chakras, un debilitado,4 de intensidad normal y 1 que sobrepasaba los límites de un ninja.

Arrugó la nariz en señal de enfado y miro con determinación a su equipo.

Vosotros vais a ir a por los demás, yo me encargaré del grandote. -Musito remangando las mangas de su sudadera dejando ver una especie de collar de bolas azul marino. -

Los demás asistieron y se adentraron en la cueva.

El legado del fuegoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora