𝚕𝚒𝚐𝚑𝚝𝚜 𝚞𝚙 »reed900

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si ven un error, no duden en corregirlo ♡

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Para Gavin, cada persona es un enigma, dentro de cada uno se esconde un mundo que sólo uno mismo puede entender y comprender. Lo mismo pasa con él, sólo su propia persona es capaz de entenderlo, tal vez si existiese un clon de él mismo, podría llegar a entenderlo, pero lo duda ya que ese clon ahora sería su propia persona, con su respectivo mundo.

Son algunos de los pensamientos con los que Reed divaga en medio del trabajo, en lo que resulta que Fowler le recrimine, lo cual esa vez no fue excepción. Su jefe apareció abruptamente con un golpe en su mesa que lo hizo saltar en el lugar.

"¡Reed!" gritó Fowler, ignorando el hecho de que el detective estaba a escasos centímetros de él y lo escuchaba perfectamente. "Trae tu trasero a mi oficina ahora, es importante."

Reed suspiró pesadamente, siempre le ponía del culo recibir órdenes, pero era lo que debía aguantar por su trabajo, el cual adoraba. Con esfuerzo debido a su notable cansancio, se levantó de la silla con ruedas, haciéndola girar con este repentino movimiento. Levantó su taza de café de su escritorio, y con bebida en mano siguió a su jefe por los pasillos del establecimiento, dedicándole una mirada de fastidio por detrás y estuvo por sacarle la lengua, pero prefirió retractarse ya que alguien podría verlo, ya que eran horas hábiles y la estación estaba repleta, tenía una imagen que mantener.

Al casi estar llegando a la oficina de Fowler, debido a los paneles de cristal que poseía ésta, en vez de paredes, pudo observar que dentro había un hombre parado, casi estático, dirigiendo su vista al escritorio de su jefe. Notó que el sujeto estaba vestido de una forma bastante... peculiar, hasta graciosa, diría él. No le prestó mucha atención, de todas formas, tal vez era un nuevo interno o un aspirante a detective. Le siguió el paso a Fowler hasta entrar a la dichosa oficina mientras le daba un trago a su café, para que luego se encuentre cara a cara con el que había visto a través del vidrio.

"Reed," comenzó Fowler, "conoce a tu nuevo compañero," sólo en ese momento todo le cayó encima a Gavin; las facciones estoicas y dominantes, la LED, y la chaqueta con un RK900 y ANDROIDE tallados en ella, como gritándolo y escupiéndolo en su cara. Un puto androide. "este es el nuevo modelo de la serie RK, una versión mejorada de Connor, como puedes ver a menos que seas miope, es el modelo RK900." se burló su jefe, mientras que el castaño no salía de su trance e impacto, de la impotencia comenzó a estrujar el vaso de café, para luego detenerse debido a que podría romperlo. La mirada del androide viajaba en vaivén de Reed a Fowler, con una expresión impasible, mientras que su LED giraba y cambiaba de color lentamente, como analizando la situación, o a los dos hombres presentes frente a él. En cuestión de un segundo, sus ojos se detuvieron en el detective.

"Hola, detective Reed.", la máquina empezó a hablar en una voz monótona y grave, muy diferente a la de Connor. "Soy el modelo RK900 mandado por Cyberlife." el androide estiró su brazo en señal de saludo, por alguna razón, Gavin tuvo un déjà vu, pero lo ignoró debido a la cólera que se acumulaba dentro suyo. ¿Cómo se atrevía su jodido jefe a emparejarlo? Peor aún, ¿¡con un puto androide!? ¡Ni en un trillón de años! Apartó la mano de la lata parlante (como él les decía) con rabia, ni muerto se iba a guardar lo que pensaba sobre ello.

"¿¡Finalmente se te zafó un tornillo, Fowler!?" le gritó al mencionado, poco importándole que los demás lo puedan escuchar y que el androide se encuentre allí todavía, el cual, ante el repentino acto, su LED cambió a amarillo, internamente se preguntó por qué. "¡No me puedes emparejar con un clon del idiota de Connor! Odio a ese jodido androide, a él, a éste de aquí, ¡y a todos los que existan!" se descargó lo más fuerte que pudo, como si quisiera que todo el mundo lo escuche, porque sólo tal vez quería no sólo convencer a los de su alrededor, sino también a sí mismo.