CAPITULO XXVI

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-Si no salen destruiremos la casa- dijo el comandante-

Se escuchó un ruido fuertísimo, habían destruido el portón y tenían acceso a la casa, Jamie me tomo de la mano y fuimos al baño.

-Abby, el sueño está a punto de terminar, son las 11:50, en 10 minutos será 30 y el sueño habrá acabado-

-No Jamie- lo abrace- No quiero que termine este sueño para entrar a la pesadilla de mi vida donde tú no estás-

-Escucha, eres maravillosa, realmente fabulosa, gracias por todo, gracias por los besos, el cariño. Gracias por darle a un maldito desdichado y psicópata lo que siempre busco en su vida: El amor

-Al contrarío- le dije- Gracias a ti por quererme, tú le diste a una maldita anti social y loca lo que siempre busco en su vida: El amor y hacer que se sienta importante por lo menos una jodida vez en su miserable vida- lo bese-

Los policías entraron a la casa y subieron, otros se quedaron abajo.

-¡No están arriba!- dijo el policía-

-¡Deben de estar en este baño!- dijo el comandante- ¡Salgan de ahí!- Los policías rodearon la puerta del baño-

-Bien es hora- dijo Jamie- Me tengo que ir-

-No, no Jamie por favor no te vayas- le rogué- Estoy segura que…-

-No Abby por favor, ya no insistas, el sueño se ha terminado. Es el fin- me beso la mano-

-Te recordaré por siempre, serás el amor de mi vida hasta la eternidad- le dije y le sostuve las manos-

-Yo lo sé, Abby quiero que sigas con tu vida, yo no soy bueno para ti-

-Te visitaré en Mary Jones todos los días de mi vida-

-Dudo que me dejen recibir visitas, pero aun así sería lindo- me solto mis manos-

-No te vayas- le dije-

-Es hora, lo lamento mucho Abby-

Lo más horrible pasó, Jamie abrió la puerta del baño, se arrodillo y puso sus manos sobre su nuca, todos los policías fueron contra él y lo detuvieron bruscamente. Yo al ver este horrible escena no pude evitarlo y me puse a llorar. El comandante me cargo y me llevo a fuera, justamente eran las 12:00 ósea 30.

-¡Jamie!- le grite- Jamie…. ¡No! ¡Suéltenlo por favor!- gritaba e imploraba-

-¡Abby!- dijo mi familia-

-¡Maldita puta de mierda!- me grito Alex- Eres una zorra-

No me importaba lo que dijeran, yo no dejaba de llorar, me sentaron en la ambulancia, mientras que a Jamie lo llevaron a la patrulla. Yo me desmaye era demasiado para mí. 

Living With The PsychopathDonde viven las historias. Descúbrelo ahora