Secretos- RIVERDALE

3: sombras del mal

Narra Bee

—¿intentó hablar contigo anoche?— le pregunté a Betty

Ella sonrió debil, estaba demacrada eso era obvio

Después de lo de anoche, Betty había aparecido en mi porche como era costumbre antes del verano, para caminar juntas a la escuela

— quería, pero no lo deje— murmuro— no se si debo, verle y simplemente aparentar que nada paso

— ¿sabes que no puedes obligar a nadie a quererte, verdad?— cuestione mirándola de reojo— incluso ahora Archie te quiere... pero no de la manera que tu añoras

— no quiero perderlo— susurro

— entonces habla con el— la codee— merece que lo escuches

Al fin sonrió levemente

— tienes razón— se removió nerviosa— por cierto, ¿cómo está Helen?

Casi me voy de cara por la impresión de escuchar a Betty mencionarla

— no muy bien— dije incómoda— no vendrá a la escuela y papá está de viaje de negocios así que no sé si fue buena idea dejarla en casa sola

Habían encontrado la noche anterior el cuerpo de Jason, oficialmente estaba muerto

Lo que todos temíamos... había sido confirmado

— es tan... irreal — murmuro — se que no quieres hablar del tema, lo sé. Pero quiero que sepas que ya no culpo a Helen por lo de Polly, la única persona que jugó con ambas fue Jason

Asentí ante lo que decía

— Polly no se lo merecía— murmuré

— no... — suspiro— y ahora está el tema de mi madre y...

— ¿qué pasa con ella?

— cree que en cualquier momento me convertiré en Polly, quiere alejarme de a Archie solo por su parecido a Jason y...

—¿quiere que te alejes de mi?— pregunte irritada

Odiar a alguien era una cosa pero la madre de Betty se ganaba parte de mi odio fácilmente

— está dolida— intentó excusase— ya no quiero que controle mi vida, no dejaré que me aleje de mis amigos

— yo tampoco— susurre

El recuerdo de las palabras de Jughead talan en mi de una manera sofocante, después de eso no dormi casi anoche, creí que era por la incertidumbre de la muerte de Jason... pero en realidad no dejaba de pensar en que... debería ser lo que yo quiera

— ya vuelvo— se despide Betty

Miró en la dirección a la que va y sonrió al notar que quien la espera es de cabellera roja

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— Hey, Bee— Reggie se ha posicionado frente a mi y no me deja pasar— ¿podemos hablar?

— tu y yo no tenemos nada de que hablar— digo irritada intentando pasar de él

— sabes que es una tontería— intentó tomarme del brazo pero lo alejé

— claro, es una tontería para ti, no para mi— lo mire con rabia— no vuelvas a dirigirme la palabra, Patan

Lo hice a un lado y seguí mi camino

En su momento, Reggie había sido muy dulce conmigo, hasta que decidí salir con el, solo fue una inocente salida de amigos y terminó con media escuela hablando de una apasionada noche que nunca ocurrió