18- "Mi Tess"

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Tessa

Lo que Emmanuel me dio a probar estaba muy rico, tanto que me terminé lo que estaba en mi vaso, me empezó a dar sueño y salí con él, al aire, me dio más sueño y recuerdo que me quedé dormida, pero más como si me hubiera desmayado.
No recuerdo otra cosa pero desperté y Emmanuel me estaba besando, no sé en qué momento pasó eso, no podía pensar con claridad y no tenía fuerzas para poder quitarlo de mi se acercó a mi oído y me susurró

-"Esta noche serás mía pequeña"

Me seguía besando, cada vez más insistente pero no le correspondía y mi cuerpo ya iba despertando, comenzó a besar mi cuello y yo trataba de pelear con él para que se alejara, las puertas de su auto tenían seguro, no habrá nada que lo detenga; te droge para traerte a mi casa, te deje dormir un rato más para que recuperarás fuerza, me dijo. Bajo por el auto, la puerta de mi lado no se podía abrir hasta que el llegó y la abrió me tapó la boca con una mano y con la otra mantuvo juntas mis dos manos así avanzó hasta la entrada a los edificios. Seguía tratando de soltarme pero él era mucho más fuerte, no podía, apenas entramos y me empojo adentro del elevador ahí me soltó

-No pongas resistencia, que no me tocaré el corazón para tratarte bien Theresa

-Eres un idiota, dejame en paz, no quiero tener nada que ver contigo

-No me llames idiota *me dio una chachetada*

Salimos del elevador en el tercer piso, era un departamento por piso, así que nadie podría ayudarme, no sé en qué momento comencé a llorar tanto, pero estaba empapada por las lágrimas. Me llevaba jalando prácticamente y así llegamos a su cuarto, me acorralo en la pared y comenzó a besarme, sus manos recorrían todo mi cuerpo y cada vez lloraba más, aquí supe que no tenía escape, tenía mucha fuerza y no podía quitármelo de encima, en 2 segundos me arrancó el vestido y me lanzó a la cama, se subió sobre mí y lo último que le dije fue:

-No, Emmanuel déjame en paz, por favor, para, déjame

Ya que alguien lo quito de encima mio con mucha fuerza y lo comenzó a golpear, no podía dejar de llorar estaba muy nerviosa, era James, no sé cómo se entero de eso pero me alegro de no ser por él, me hubieran violado, mis amigas llegaron detrás de él

Kim: Por dios, James para, vas a matarlo

Dani: Ya fue suficiente, mira hasta inconsciente esta

Cami: En estos momentos Tessa te necesita a su lado, no en la cárcel por homicidio

James levantó la mirada y le sonreí de vuelta, salió al baño a lavarse las manos ya que a Emmanuel le había sacado una que otra marca de sangre

Cami: Lo bueno que te encontramos *dijo abrazándome*

-¿Cómo lo supieron chicas?

Kim: Iba saliendo del baño y escuché a 2 tipos hablando de eso, así que te empezamos a buscar y llamamos a James

-Gracias por llamarlo, pero más a él que vino, las amo chicas

Dani: Nosotras a ti Tessa, nos vamos, James estará ansioso por hablar contigo, nos alegra que no haya pasado nada

-Nos vemos chicas, no dejen que James pase, me cambió y salimos

Kim: Esta bien Tessa, hablamos cuando te sientas mejor, ya paso, no llores mucho

Me levante a ponerme el vestido cuando ellas iban saliendo, no me pondría los zapatos, Emmanuel seguía en el suelo; ahí se quedaría. Salí de la habitación y ahí estaba James, de espaldas me acerque más a él

-Gracias James

-¿Estás bien? ¿Te hizo daño? ¿Te tocó? ¿Qué te hizo Tess?

-Llegaste a tiempo no pasó nada, solo.. . *no sabía si contarle esto*

-Dime que te hizo Theresa, aún puedo golpearlo

-No te diré si lo que piensas es golpearlo más de lo que ya lo dejaste

-Por dios Theresa, estuvo a 5 segundos de violarte y no quieres que lo golpeé, podría matarlo

-Mientras más daño le hagas, nos buscará de nuevo, por favor vámonos, no tengo ánimos ni fuerzas de estar fuera de casa, a parte ya serán las 4 de la madrugada, nisiquiera ganas de denunciarlo

Quería llegar a mi habitación solo a llorar, me sentía sucia; aunque fue sobre el vestido, me toco toda, nadie en mi vida me había hecho esto

-No puedo creer todo esto que me estas diciendo Theresa, es increíble, si no hubiéramos llegado, ahorita te estarías lamentando y pensando lo contrario *salió del departamento*

No me quedó de otra que ir detrás de él, no podía seguir ahí dentro y aunque la casa en la que vivíamos no era mía, no tenía familia ahí, la había sentido como mi hogar desde el primer instante, solo quería llegar ya. Camine detrás de James hasta llegar al auto y cada quien subio de su lado el camino transcurrió en calma y silencio; ninguno habló y sentía como me iba quedando dormida

-Tess, Tess, despierta ya llegamos *sentí como James me movía en el lugar*

Abri mis ojos y bajamos del auto, estaba por subir las escaleras y escuché la voz de James a las espaldas

-Piensa bien las cosas Tessa

-James, no pasó nada, me metió a su cuarto; me acorralo en la pared y me comenzó a besar más, ahí aún tenía el vestido puesto pero me empezó a tocar, sus manos pasaron por todo mi cuerpo y se detenía en las partes más íntimas después de esto me quito el vestido y me lanzó a la cama, aquí fue cunado tú llegaste *no sé en qué momento comencé a llorar, cuando me di cuenta ya tenía a James abrazándome y con su pecho todo mojado*

-Por una parte necesitabas desahogarte Tess, cuando terminamos de besarnos hace rato, estuve a punto de pedirte que te quedaras conmigo; de haberte convencido, esto no hubiera pasado

-Gracias por todo James *se iba acercando a mi y yo no me podía hacer para atrás, era como si nuestros cuerpos se atayeran solos*

-Hasta llorando y con el maquillaje corrido estás preciosa mi Tess *cada segundo estábamos más cerca de besarnos*

-James ahora no, no me siento bien, quizá te lo deba

Y diciendo eso subí corriendo por las escaleras para llegar a mi habitación, me bañe y no tarde en quedarme dormida, pensando en que estuve por besar a James de nuevo, no sé hacia dónde iba esto, pero en cierta forma me gustaba.

Mi contrato perfecto, eres tú Donde viven las historias. Descúbrelo ahora