The breakfast club y Peter Pan

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(Ben)
14 Jun 2000

¿Qué más podría decir?.
Ya estaba en una realidad de la que no iba a salír. Joe es la dulce fantasia en una oscura realidad. Es como miel entre un mundo de brea... haría lo que fuese por él, así como sé que él haría lo que fuera por mi.
Lo amo. En serio.

Cuando a una persona le dices te amo es porque se lo ganó de alguna manera.

Un mejor amigo se gana el título después de que pasan mucho en poco tiempo -bueno, no necesariamente... pero para mí así fué con Gwil- y a esa persona que es casi un hermano, no dudas en decirle te amo, pero siempre está acompañado. Por ejemplo <<como te amo, baboso>>.
Es muy diferente decirle te amo a alguien que no es familiar o amigo... A una persona que casi no conocías, a esa persona que te hace sentír que vas a vomitar mariposas a pesar de que a penas hace algunos días memorisaste su nombre completo.

Bueno. Y si es tan especial, no debería de ser un secreto, ¿verdad?.
Cuando pasabamos por los pasillos, Joe no decía nada, pero aún así podía notar la menera descarada -y para mí, "divertida"- en la que veía a todos si nos dirigian la mirada. Entre todos, adoptamos la costumbre de caminar como todo un escuadrón.

Él junto a mí, justo en el centro; metiendo la mano en mi bolsillo trasero.
Lucy pasando como una diva, sacudiendo su cabello.
Rami al otro extremo de Lucy, peinando su cabello hacia atrás como un don Juan.
Gwil detrás, acomodando su chaqueta de deportista y volteando la cabeza hacia atrás para parecer inalcansable.
Sami a lado de Gwil, trasladando un palito de paleta de un lado hacia el otro con la misma lengua.

Ahora imaginen todo lo anterior en camara lenta y con rock n' roll part 2 de fondo.
Abriendo paso en todos lados, pero sin detener el trafico.

Todo mundo sabía que eramos los putos amos del pasillo.
Reyes de detención y favoritos de algunos maestros.

●●●

Los examenes de admisión (y tesis) ya habían sido entregados, pero aún no resiviamos las cartas de la universidad y eso, sin duda, tenía a todos bebiendo diez vasos de café en menos de un minuto.

Era el día en el que a la mayor parte nos entregarían las cartas.
Obviamente, hice el tramite a la mejor universidad, (a... la que sea en la que iban a estár absolutamente todos nosotros).

Los seis hicimos una tesis para entrar a la UDC, ya que esa fué la mejor opsión a que no nos diera una tremenda depresión porque nos separariamos unos de otros durante tres o cuatro años. De por sí, en vacaciones, cada día resivía una llamada de Joe que cada vez duraba más y más. Nos calmamos cuando llegó a mi casa por mi cumpleaños.
Todos siempre enviabamos un correo para todos que era, literalmente, kilometrico.

Claro que no estudiariamos la misma carrera, pero estaríamos ahí para lo que se necesitara.

●●●

Oh, por...
-¡¡Benjamin Jones, responde tu puto telefono!!- exclamó Gwil a penas tomé su llamada.
Era de tarde, ya en mi casa. Resién había llegado mi carta de la universidad, pero mi madre fué la primera en leerla, después mi hermano Mike. Con sus expresiónes pude desifrar la misma respuesta.
-¿y qué se supone que acabo de hacer, Lee?- contesté al reclamo de mi amigo.
-ah, cierto... perdón. ¿Ya llegó tu carta?.
-sí, ¿y también a tí?
-sí.
-¿que dice la tuya?
pasé, dios santo... pasé!.
-pues... me tendrás a tu lado por los siguientes cuatro años, amigo... porque ¡yo también pasé!.

A travez de la misma llamada, ambos grutamos como unas chicas emocionadas.
-¿sabes si Jojo entró?
-justo ahora le iba a preguntar, en realidad.
-¿crees que Ramita y Lex también entraron?
-por favor, Gwil... ellos son unos genios.
-eso no lo niego.

Que emoción, ¡diablos!, pero... ¿porqué pasa esto tan rapido?... no quería que todo esto fuera tan... rapido.

Me encanta la idea de pasar el tiempo con ellos; sin embargo, me sentía extraño por crecer tan rapido. Según en mi mente, a penas hacía algunos días yo seguía teniendo sueños de... quisas adoptar un perrito y después... en ese momento, me dí cueta de que en algunos meses ya sería conocido como señor Jones para los maestros... no sería Benny.

No quería... no quería crecer tan rapido.
Pero al mismo tiempo sí quería hacerlo, porque... digo, un adolescente no puede casarse, hacer una familia, conseguir un buen trabajo, etc.

Era algo así como Peter Pan, pero yo no tenía un completo paraíso... mi único momento más parecido a estár en el paraíso era cuando me lo inventaba... estando a lado de Joe.

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