ELLA

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La vergüenza atravesó mi cuerpo al sentir la caída inminente

El té esparciendo por todo el suelo y los trozos te la taza también

Me debatí entre limpiar todo mientras lloraba o salir corriendo y enterrarme bajo tierra.

Corrí y fui a parar a una plaza

La gente me miraba extraño, aunque alguno me preguntaba que me pasaba, yo no tenía voz para explicarlo.

Necesitaba tanto ese empleo y lo habia descuidado al ver a esos ojos turquesa más de cerca.

Había perdido la oportunidad, probablemente lo había perdido todo.

Me quede bajo un árbol hasta que oscureció pensando en la manera de que no me despidieran y así pagar el tratamiento de mi madre...

Pero aunque no quisiera tampoco podía dejar de pensar en él

Es sus ojos y en que por fin había entrado a la cafetería.

Esa noche no pude dejar de pensar

Espinas de un corazón roto Donde viven las historias. Descúbrelo ahora