- ¿Es en serio? - dicen animados a dúo Pierre y René.
- Si. - dice el tío Tim. - Ustedes también vienen.
René gira su cabeza y me mira con una sonrisa muy amplia. No puedo evitar reír.
- Tim, no se si te lo había mencionado antes pero, te amo hermano. - dice Pierre. Este ríe.
- Sigo pensando que no es una buena idea. - dice papá.
- Por dios Patrick. - se queja Tim. - No seas tan amargado. Es mi despedida de soltero, por ende se hace lo que yo quiero. Y yo quiero que todos vayamos a Las Vegas, será un viaje de chicos. Así que preparen sus cosas que nos vamos. Le avisaré a Alaric y llamaré dos limos. - sale de la sala.
¿Alaric? Diablos. Vine el vecino intenso.
- No puedo creer que nos vamos a Las Vegas. - dice René alegre.
- He estado toda mi vida preparándome para este momento. - dice Pierre. - Planeaba irme para mis 21, pero gracias a Tim mis planes de adelantaron.
- ¿Será opcional? - pregunta Gus.
- Ay no empieces Fergus. - dice Pierre. - Te vas a emborrachar y dormirás con una sexy stripper. Haré que ames a Las Vegas, tanto que te querrás casar con ella.
Gus me mira. - No me dejes solo con el, ¿sí? - dice en tono de suplica.
- Solo si tu haces lo mismo por mi. - digo.
- Trato hecho.
Papá se nos acerca.
- Oigan, si quieren quedarse yo no...
- No. - dice firme Pierre. - No lograrás que nos quedemos, Tim nos invitó por ende iremos.
- ¿Si sabes que ninguno tiene la mayoría de edad para jugar en un casino, no? - dice papá.
- ¿Y eso que? No es como si tuviera dinero que apostar. - dice Pierre. - Estaremos en la ciudad que nunca duerme, en un lujoso hotel, con una amplia piscina, buffet y viajaremos en limo. ¿Realmente crees que me preocupa no poder jugar en el tragamonedas?
- Es que... - dice papá.
- No nos llevaras como llevan a los niños en Disneylandia, con una correa como perritos. - digo.
- ¿Acaso nunca van a perdonarnos? - dice Pa.
- Eramos dos con tres niños pequeños y Pierre siempre revolucionando el gallinero. - dice papá.
- Desde pequeño era sauvage. - dice.
- Precisamente por eso no mantendremos juntos. - dice papá.
Pierre mira a Gus, este suspira por lo bajo.
- Yo me haré cargo de ellos. - dice Gus. Mis padres lo miran. - ¿Que? ¿No confían en mi? - agrega con ese semblante serio tan característico.
- No lo sé... - dice papá no muy convencido.
- ¿Me dejaban con los tres cuando eran unos diablillos y crees que ahora no puedo manejarlos?
De niños, Pierre siempre iba por las vacaciones a Napa y cuando nuestros padres tenían ganas de una escapada romántica nos dejaban con Gus a cargo.
Siempre nos daba la libertad de hacer lo que quisiéramos, siempre y cuando no sobrepasaramos los límites de su paciencia.- ¿Estas seguro que quieres hacer de niñera de Pierre? - dice papá.
- Como si no lo fuera con frecuencia. - dice Gus.
ESTÁS LEYENDO
Déjalos que Hablen
Novela JuvenilTodo marchaba relativamente bien en tu vida, hasta que tus padres te obligan a cuidar la casa de tu tío durante sus vacaciones, en una ciudad diferente y quien tiene que echarte un vistazo de vez en cuando es el vecino de enfrente; un apuesto hombre...