La confesión

5.6K 626 413
                                    

Una carta llena de sentimientos.

Una inhalación profunda, sus manos temblorosas y su corazón acelerado.

«Vamos Izuku. Es solo una carta.»

Es el pensamiento del chico de cabello verde parado frente a los casilleros durante las últimas horas de clases.

Izuku Midoriya tiene un enorme crush con el mayor de los hermanos Bakugō, Katsuma. El chico es lindo, inteligente, deportista y sobre todo amable. De los pocos jóvenes que respeta a todos por igual sin importar el nivel económico, la apariencia, las habilidades, la sexualidad o la forma de ser de cada persona.

Izuku ha estado enamorado de él desde el momento en que el chico lo defendió de un grupo de bravucones mientras estaban en la escuela primaria y desde ese instante no pudo hacer más que observar desde lejos cada vez más maravillado por el chico.

Pero ése es su momento. Gracias a las motivaciones de sus amigos ha decidido finalmente confesarse. Si las cosas salen mal Katsuma lo rechazara y no habrá vuelta atrás, sin embargo, las cosas podrían funcionar. Katsuma podría desear intentarlo y quizá, después de un par de citas y tiempo de conocerse, se enamoraría de Izuku tanto como éste lo está de él.

Katsuma es definitivamente el tipo de chico que le daría una oportunidad. En realidad, si Izuku no fuera tan tímido como para no correr a ocultarse cada vez que Katsuma pasa cerca de él, seguramente estaría dentro de su grupo de amigos. Es un chico tan amable que para él cualquiera puede ser su amigo, siempre esta dispuesto a ayudar a los demás y a hacer que todos se sientan Incluidos. A Izuku le parece sorprendente que alguien como él...

—¡Camina anciano! Si no nos apuramos la vieja bruja nos castigará —. Un grito se escucha en el pasillo y nota como un par de personas caminan en su dirección. Rápidamente coloca la carta dentro del casillero y sale del lugar antes de que los vean.

—Ya voy Tsuki, no seas tan desesperado. —Son las últimas palabras que escucha antes de encontrarse con su mejor amiga esperándolo en la entrada de la escuela.

—¿La pusiste? —pregunta emocionada consciente del plan de Izuku, este solo sonríe y asiente igual de emocionado. Los dos comienzan a caminar rumbo a su casa no sin que antes Izuku le dirija una última mirada a su escuela.

... le parece sorprendente que alguien como Katsuma tenga de hermano gemelo a Katsuki Bakugō. El delincuente juvenil de la UA.

Katsuki espera impaciente a su hermano en los casilleros de zapatos. Tienen que apurarse si no quieren que su madre los regañe por llegar tarde y no ayudar el día de la comida familiar. Katsuma solo camina tranquilo y sin preocupaciones mientras sonríe travieso.

—¡Vamos Tuski! No vamos tan tarde. Si caminamos rápido llegaremos a tiempo. —pronuncia el mayor de los dos mientras se cuelga a Katsuki por los hombros de forma juguetona, el más gruñón de los dos hace lo posible por tirarlo.

Contrario a lo que cualquiera pueda pensar debido al contraste entre sus personalidades el par de hermanos Bakugō se llevan muy bien. Son mejores amigos, hermanos, compañeros de travesuras y cómplices. Por supuesto tienen peleas, desacuerdos, cosas comunes entre hermanos porque es imposible para ellos coincidir en algo. Sin embargo, saben que pueden confiar el uno en el otro sin importar la situación.

Katsuki finalmente logra que su hermano deje de usarlo como mono a un árbol y abre su casillero. El trozo de papel cae al suelo con la suavidad de una pluma. Antes de que Katsuki pueda hacer algo su hermano se apresura a levantarla.

Confesión AccidentalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora