CAPITULO DIEZ

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POV RUBEN.

Hoy era el ultimo día en el paraíso lo peor de todo es que teníamos que regresar ese mismo día a Karmaland, pronto todos comenzamos a empacar las cosas y emprendimos el viaje a Karmaland pero esta ves el camino a casa fue mas divertido en compañía de Samuel a pesar del poco tiempo que conocía a los demás se había integrado bastante bien.

- Por fin, dulce, dulce hogar.

- Así que aquí es donde vives es acogedor.

- No es mucho pero algo es algo no crees.

- Por cierto donde voy a vivir.

- Que no es obvio vivirás conmigo..

Las elecciones pronto llegaron y para sorpresa de todos Luzu salio ganador aunque muchos cuestionaban como llego a ganar nadie se atrevía a decir nada para conveniencia de todos Mangel y Lolito se reconciliaron y posiblemente reanudaran la boda en un futuro quizás no muy lejano.

El gobierno de Luzu fue bastante bien al parecer de todos pero lo único que me importaba era como iba a decirle a Samuel que fuera mi compañero de vida para siempre. Llevaba meses carcomiendo me la cabeza de como se lo diría pero por fin un día me arme de valor para por fin hacerlo oficial de una vez por todas.

- Donde estamos, Ruben espero que nos sea otra trampa..

- Tranquilo ya casi llegamos... muy bien abre los ojos

Lo único que se me había ocurrido era ponerle en un cartel gigante si quería casarse conmigo y una cena romántica a la luz de la luna solo esperaba que el aceptara.

- Entonces que dices - dije arrodillándome justo detrás de el, sosteniendo una pequeña caja de terciopelo con un anillo de compromiso - ¿Aceptas ser mi esposo?

- Claro que acepto..

Me levante de mi lugar para colocar el anillo en el dedo del que seria mi futuro esposo y así pasamos la noche disfrutando de la compañía del otro. Y con ansias la fecha de la boda llego; estaba parado en el altar y los nervios cada vez eran mas fuertes. No podía creer que este día por fin había llegado y el echo de que compartiría el resto de mi vida con una persona tan maravillosa como lo era Samuel.

De repente las puertas se abrieron anunciando la llegada del novio y eso me puso aun mas nervioso pero una mano se posiciono en mi hombro que era nada mas que mi mejor amigo Mangel dándome ánimos y tranquilizándome un poco. Voltee a ver a mi futuro esposo y se veía increíblemente en traje.

Samuel al llegar al altar el padre dio comienzo a la ceremonia llegando a la parte mas importante.

- ¿Aceptas a Samuel de Luque como tu esposo?

- Acepto

- Y tu Samuel ¿Aceptas a Ruben Doblas como tu esposo?

- Acepto

- Entonces por el poder que me se me ha otorgado por los dioses de Karmaland, yo los declaro esposo. Puede besar al esposo.

Y era oficial por fin este increíble hombre era mi esposo para la eternidad...

- Ruben... Ruben.. despierta

- ¿Que?.

- Ruben, enserio despierta o senos hará tarde.

- Espera que.. tu ... boda.

- Ruben es enserio, no me digas que te emborrachaste y te quedaste dormido.

- ¿Donde estoy?

- Donde mas podrías estar pues en mi casa, tontito... vamos levántate.

No sabia que estaba pasando todo había sido tan real que no podía haber sido un sueño. Me levante del lugar donde me encontraba desconcertado por lo que acababa de vivir dirigiéndome como podía a lo que al parecer era la habitación de Samuel.

- Oye, ¿Estas bien?

- Si supongo.

- Dime que sucede..

No tuve de otra que contarle lo que al parecer había soñado con el y conforme iba contándole lo sucedido en mi mente el se reía o incluso se sorprendía por lo que había creado mi mente.

- Increíble, suena un poco descabellado no crees.

- No lo se pero se sentía tan real.

- Tranquilo ya estas en la vida real y lo mejor es que ambos llevamos cinco años casados.

- Enserio.

- Mira tu mano - era cierto tenia un hermoso anillo adornado con una gema verde muy preciosa - Genial.

- En fin iré a ducharme...

Observe como el cuerpo de Samuel desaparecía dejándome solo en aquella habitación me acerque a una de las ventanas y en efecto me encontraba en la mansión flotante de Vegetta. Deje escapara un suspiro de cansancio ya que seguía sin creerme que todo había sido un simple sueño pero que mas podía hacer lo único que importaba es que estaba casado con ese hombre tan guapo.

- Muy bien va monos o llegaremos tarde y odio ser impuntual...

- Por cierto Veg, como llegue hasta tu baño.

- Enserio no lo recuerdas. 

- Nop 

- Ahg, esta bien te lo contare...


Y AQUÍ EL FINAL DE LA HISTORIA ESPERO LE HAYA GUSTADO TANTO COMO YO DISFRUTE DE ESCRIBIRLA...

OBSESSION - RubegettaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora