Primer Amor (Que No Te Engañen Los Cuentos De Hadas)

Capítulo 8: La Cita

Esta semana he estado muy concentrada en estudiar para los seminarios que tenía y al final el esfuerzo dio resultados porque terminé con unas notas increíbles, respecto a Fabio, le ofrecí estudiar juntos pero el se negó y dijo que lo haría sólo porque necesitaba concentrarse, no entendí que quiso decir con eso, la mayoría del tiempo siempre estudiamos juntos y no pensé que esta sería la excepción, pero la verdad es que últimamente ha estado raro, no hemos hablado de "ese" tema, los dos hicimos como que nunca pasó, pero Fabio me ha estado evitando, cuando nos vemos sólo cruza dos palabras conmigo y se larga, el resto de nuestras conversaciones es por mensajes, así ha transcurrido la semana con él.

Ahora mismo me estoy arreglando para mi cita con Dante, tengo a Michaela en videollamada porque aunque quería venir a ayudarme al final tuvo que quedarse en casa porque estaba un poco indispuesta, estoy muy emocionada con esta cita, espero que todo salga bien.

- No te cansas de llevar vaqueros Tiana, existen los vestidos y las faldas

- Es que los vaqueros son cómodos

- Haz el favor de buscar algo en tu armario y quitarte eso

Al final sigo el consejo de Michi y me decanto por una falda secretaria rosa pálido que me llega por encima de las rodillas y una blusa blanca de tirantes, lisa y que me hace un poco de escote, luego voy a por mis siempre fieles Converses blancos.

- Ahora si estamos hablando, pero suelta tu pelo que es hermoso, aún no entiendo porque te lo picaste si ya casi tocaba tu trasero

- Mi madre que tiene una obsesión con acabar la vida de las puntas partidas y se emocionó cuando me hizo el corte, de todas formas aún sigue largo y no tardará en crecer

- Es verdad, el pelo te crece a la velocidad de la luz, ahora vete que se te hará tarde

Miro mi reloj y oh mierda, ya estoy llegando tarde al punto de encuentro, me despido de Michi y corro para tomar un taxi. Cuando llego al centro comercial, que es donde se supone que nos encontraremos Dante y yo, lo busco con la mirada y ahí está, recostado de una pared y tecleando algo en su móvil.

Lleva un pantalón de mezclilla, al igual que su chaqueta, una camisa blanca y zapatos blancos, vaya que sabe combinarse este chico, está guapísimo.

- Hola - digo con una vocecita y cuando levanta la mirada, me hace un pequeño repaso, deteniéndose un poco en mis piernas y cuando sus ojos vuelven a mi cara, tienen un brillo que nose distinguir

- Creía que eras hermosa, pero estaba equivocado, eres más que eso, eres espectacular - me da un beso en los nudillos y me sonrojo a más no poder, mi cara ahora mismo debe ser un tomate

- Gracias, tú también estás muy guapo- lo digo un poco a la carrera y Dante se ríe, me tiende la mano y me conduce hasta su coche

- Y bien, a donde vamos?

- Ya verás cuando lleguemos

- Sólo espero que no seas un asesino en serie

- Tranquila, yo ayudo a encerrarlos en la cárcel, no soy uno de ellos

Me rio de su comentario y observo
por la ventanilla mientras él conduce,  llegamos hasta un parque y cuando nos bajamos del auto lo veo sacar del maletero una canasta de picnic, esto no me lo esperaba, Dante mira mi cara de desconcierto.

- Sé que dije que iríamos a tomar un café o algo así, pero pensé que esto sería mejor para conocernos y hablar, si quieres ir a alguna parte me dices y nos vamos

- No no, esto es perfecto, sólo...solo no me lo esperaba, pero está bien - le dedico una sonrisa tranquilizadora

Comienzo a ayudarlo para montar nuestro picnic improvisado, Dante ha traído sándwiches, fresas, bombones y algunos refrescos.

- Me encanta el cocholate - digo tomando un bombón - Haz descubierto mi punto débil

- Genial, me alegra oír eso, empiezo a descubrir cosas de ti

- Tú qué sabor prefieres?

- Fresa, todo lo contrario al chocolate - me tiende un sándwich y un refresco -  Cuéntame de ti, de tu vida

- Emmm, a ver, vivo con mi madre y soy hija única, estudio medicina, eso ya lo sabes - me rio, soy pésima para esto - me encanta leer, salir a fiestas con mi amigos y pues, no mucho más

- Ya veo, supongo que todo lo demás tendré que ir averiguándolo yo

Me guiña un ojo y continuamos conversando acerca de todo, la escuela, la vida, me cuenta acerca de sus padres, que viajan constantemente debido a su negocio pero que son padres excelentes, tiene dos hermanos,  uno mayor que es ingeniero y una hermana de 14 años, yo comienzo a relajarme cada vez más entre conversaciones y chistes y termino pasando una tarde estupenda.

Cuando el Sol comienza a ponerse es en el momento que me doy cuenta que han pasado horas

- Creo que deberíamos ir recogiendo todo - le digo a Dante y el se me queda mirando por unos segundos, comienza a recoger las cosas y yo lo ayudo.

Lo observo mientras hace todo y es como si quisiera decirme algo pero no se decide, ya en el auto antes de arrancar se queda viendo el horizonte y luego me dice:

- Te apetece que vayamos al cine ahora? Están pasando una peli muy buena, hace tiempo quería ir a verla pero no he tenido la oportunidad, me encantaría ir contigo

Veo que aprieta el volante con las manos y me mira fijamente, está nervioso, eso es lo que quería decir, es una ternura piensa que puedo rechazarlo

- Suena estupendo, vamos a ver esa película

Cuando llegamos al cine, Dante compra las entradas y luego va por palomitas y un helado para mí, en lo que espero por él le respondo un mensaje a Michi diciéndole que todo está perfecto y que la cita no puede ir mejor con el Adonis, él regresa y nos disponemos a entrar a la sala, un chico pasa por mi lado a toda velocidad en el momento que pruebo mi helado y termino con una mancha a un costado de mis labios

- Eh!! Mira por donde vas capullo - Dante se gira hacia mí - Estás bien hermosa?

- Sí sólo necesito un pañuelo para limpiar este desastre

- Yo puedo ayudarte con eso - el Adonis saca un pañuelo de su bolsillo y cuando me dispongo a cogerlo lo aparta

- Permíteme - me quedo muda un momento y luego asiento

Comienza a limpiar suavemente la mancha de helado y en el transcurso veo que sus ojos se desvían una o dos veces hacia mis labios y cada vez más se acerca a mí, cuando pienso que ha terminado y guarda el pañuelo, pasa su pulgar por mi labio inferior

- Quedó algo de helado aquí - está muy cerca de mí, puedo sentir su aliento, no creo que esto sea correcto, es nuestra primera cita, lo conozco hace nada y Fabio, él, mejor no pienso en mi cavernícola, y justo eso es lo que hago, no puedo dejar de mirar los hipnóticos ojos del chico que tengo frente a mí, cuyos labios están a unos escasos centímetros de los míos, decido que debo dejarme llevar y cierro mis ojos, Dante suspira y empieza a acortar el poco espacio que queda entre nosotros, pero de momento :

- Tiana!!! - oigo que alguien grita mi nombre con enojo, abro los ojos y me separo del Adonis sobresaltada, no puede ser, ahí a unos escasos metros de mí,  está Fabio con un cabreo monumental, lo sé por su mirada

Madre de los tomates, ahora sí se prendió esta mierda.