Escepticismo

Capitulo 7

Me quedé congelada al ver a ese hombre frente a nosotros, Sasuke mantenía esa pose defensiva y la tensión del momentos había logrado erizar mi piel.

-¿No vas a presentarme a tu...hembra?-sonrió el hombre de largos cabellos ébano mirándome, mi cuerpo comenzó a temblar bajo sus ojos negros.

-¡No te atrevas a siquiera mirarla, estúpido!-escupió Sasuke, tomándolo de sus ropas a una velocidad impresionante. A pesar de la obvia amenza en su voz, el hombre solo sonrió divertido.

-Oh, ya veo...hiciste algo tan estúpido como involucrar sentimientos con una hembra...

-¡Callate! Si dices una palabra más yo...

El hombre en un moviento casi imperceptible atravesó a Sasuke con una especie de espada. Estaba tan asustada que ni siquiera un grito logró salir de mi garganta. Solo podía ver al muchacho sangrar a grandes cantidades sobre la tierra fría, al hombre sacar su arma y mirarnos como si fueramos simples cucarachas.

-Eres muy atractiva, me recuerdas a alguien-habló el tal Madara acercándose a paso lento hacia mi, mientras su espada aun goteaba con la sangre de Sasuke.

-Sa-sasuke...-tartamudeé. La idea de verlo morir de una forma tan cruel me oprimia el corazón, pero mi cuerpo no se movia, mas que para temblar.

-Tranquila, vivirá si eso te preocupa-se inclinó frente a mi y cerré los ojos fuertemente, deseando que desapareciera.-¿Tienes miedo?

-Por favor, no me haga nada-supliqué atreviéndome a mirarlo a los ojos.

-¿Qué crees que podría hacer yo contigo?-se acercó lo suficiente a mi como para sentir su aliento calido y pausado en mi cuello-Tu aroma es embriagante, también quisiera tomarte.

Esa frase fue lo sufiente como encencer cada una de las alarmas en mi. Grité tan fuerte como me lo permitió mi garganta y empujé al hombre inútilmente lejos de mi.

-¡Quieta!-Madara logró somenter mi cuerpo la tierra, posicionándose sobre mi.-Creo que tendré que hacer más...receptiva.

Esas paabras me hicieron recordar la primera vez que Sasuke estuvimos juntos, y no quería, no quería que ese hombre me tocara. Mi corazón latió tan rápido que mis oídos se taparon.

-¡Sasuke! ¡Sasuke! ¡Sasuke!-le llamé. Suplicando por ayuda.

-No despertará por ahora...solo relájate-tomó mis barbilla para dirigir mi mirada a la suya. Sabia que ese seria mi fin.

-¡No! ¡Suéltame, maldición!-grité desesperada, todo ocurrió en un pestañeo. Había empujado al hombre tan fuerte que se estrelló con una árbol partiéndolo por la mitad.

-Sabia que eras tu-sonrió, pero esta vez fue una expresión llena de satisfacción.-Ven conmigo, pequeña.

-Yo...Yo...-estaba tan confundida por todo lo que estaba pasando que a penas y podía pronunciar palabra.

-Vendrás conmigo.

-Vete a la mierda-antes de que pudiera llegar a mi otra vez, Sasuke se interpuso. Todo fue tan abrumador que lo ultimo que escuché fue su voz llamándome.