Sólo amigos.

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Me levanté. Fui al instituto. Di clases. Y fui a casa. Así estuve con esa misma rutina toda la semana. Casi no hablaba con Connor. Nuestra relación se había vuelto mas suave y no mandaba miradas de asco hacia mí. Sólo hacia Austin. Ciertamente me divertía.

El baile de presentación se acercaba y todas las chicas se dedicaban a elegir lo que llevarían puesto y los chicos a quién llevarían puesto.

Austin insistió varias veces en llevarme, pero para mí era una pérdida de dignidad enorme esas cosas.

Nunca había ido a ninguna, pero la idea de ir no me atraía nada.

Luke quiso pedírmelo pero le avisé antes de que lo hiciese.

Al final Luke iría con Tiff y Olly con su cita misteriosa.

Yo me haría un bizcocho de chocolate para mí solita y como estaré sola podré poner la música a tope.

Y eso es lo que se llama una tarde perfecta.

—¿Qué tal me queda? —preguntó Olly entrando en mi habitación con un vestido azul marino bastante pomposo en la falda.

—Está bien. 

—Decir cumplidos no es lo tuyo, eh.

—Yo es que sería capaz de ir allí en vaqueros y una camiseta de zombies, pero vas bien para ser un baile. —dije, bromeando.

—Casper vendrá en diez minutos y no estoy peinada. Mierda. —dijo, saliendo corriendo de la habitación.

—¿Casper? ¿Cómo el fantasma? —reí y Olly bufó desde el cuarto de baño.

—Pues es guapo. Y al menos tengo cita. No como los otros años.

—¿Y por qué este año sí?

—Era invisible, supongo. Hasta que viniste tú.

—¿Eso es malo?

—Para nada. Sólo que aquí nunca vienen gente nueva y menos de otros países. Todos quisieron conocerte y como yo soy tu prima y tú les dabas largas pues ya sabes.

—Lo único que sé es que te explicas de pena.

El timbre sonó y Olly bajó corriendo.

—¡SAB! ¡ME VOY! —gritó desde abajo.

—¡NO ACABES EN UNA CUNETA CON 5 KILOS DE COCA! ¡Y PÁSALO BIEN!

—¡NO TE COMAS TODO EL BIZCOCHO! ¡TE VEO POR LA NOCHE!

La puerta se oyó cerrar y puse la música.

                       ***

En el momento que la canción paró, se escuchó el timbre sonar. Apagué la música y fui abajo a ver quién era.

Pregunté quién era pero no obtuve respuesta. Abrí la puerta y...

—¿Connor?

—Presente. —dijo su sonrisa ladeada que tanto me gustaba.

—¿Qué haces aquí? ¿Y con esmoquin?

—¿Vienes al baile?

—Claro que no. ¿Y ahora lo preguntas?

—Genial que no quieras ir, porque yo tampoco. —entró y cerró la puerta tras de él—. ¿Qué hacías que no me abrías la puerta?

—Escuchar música. —dije, cautelosamente.

—¿Quieres ver alguna película?

¿PERO QUÉ...?

—¿Qué haces aquí? ¿No estabas en el baile?

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⏰ Última actualización: Nov 28, 2014 ⏰

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