Danganronpa: Criminal Mind

Acto 2 (2/5)

Habitación de Annie
Horario de tarde

~Annie POV~

En aquel momento me encontraba recostada en mi cama, observando el cielo nublado a través de la ventana, al fondo de mi habitación.

Tras la reunión donde se nos habló del consejo, Kaori se ofreció a hacer un almuerzo para todo el mundo, a lo que la mayoría aceptó encantado. Por suerte, Luck no volvió a mencionar la idea del envenenamiento y prefirió alejarse del grupo. Note que esto había desanimado a Jun, pero se recompuso cuando Jerome se sentó a su lado.

Por lo visto, los lazos entre nosotros no estaban tan dañados como pensaba. Por el contrario, excepto por Luck y Alice, pareciera que estos no hacían más que fortalecerse.

Decidí que no quería quedarme en mi habitación todo el día, no había mucho que hacer, pero por lo menos podría charlar con alguien. Sin embargo, me quede observando un momento mi atuendo.

Quizás no es el mejor momento para pensar en esto, pero creo que necesito un cambio de look. No me desagrada mi atuendo actual, mas necesito algo más fresco... Que no llegue al nivel de lo que debía usar en mis bailes...

Al abrir mi armario, pude encontrar un montón de ropajes iguales al que tenía. No me sorprende, los demás también comentaron que sus armarios estaban repletos del mismo estilo de ropa, excepto por Apolo y Krista, quienes admitieron que los suyos tenían algunas vestimentas diferentes.

Revisando un poco, me emocioné al encontrar algo que no era una blusa y un pantalón. Se trataba de una camisa de color blanco, con un pequeño lazo negro en el cuello, acompañado de un vestido de color rojo que empezaba un poco por encima de los pechos, adornados con un pentágono blanco con botones negros, acompañado de un cinturón del mismo color. Además, entre mis zapatillas encontré un par de zapatos negros, muy similares a las que usan las bailarinas de ballet.

Cierto es que normalmente prefiero usar ropa que me cubra correctamente, pero no pasará nada por cambiar de estilo por una vez, ¿no?

Me cambié rápidamente y me miré al espejo. Había algo que no me terminaba de convencer. Quizás podría ser... Sí, debe de ser. Me quité el cintillo con la flor de mi cabeza, lo cual permitió ver más claramente lo ondulado de mi cabello. Eso definitivamente era lo que me faltaba.

Contenta con el cambio, abandoné la habitación, dispuesta a buscar a alguien con quien hablar. Para mala o buena suerte, me encontré a alguien nada más salir.

Se trataba de Shiori, sentada en las escaleras que conducían al segundo piso, con un rostro melancólico. La saludé, mientras que ella colocó la mejor sonrisa que pudo y me contestó. No se veía con ánimos de charlar.

Cuando me fijé en lo que miraba con tanto ahínco, me percaté de que estaba observando la puerta de la habitación de Alice.

Pese al corto tiempo que pasaron juntas, ella se veía realmente preocupada por lo que pueda ocurrir. Intenté hacer conversación, pero se podía ver a kilómetros que se estaba sintiendo incómoda, por lo que decidí que era mejor dejarla sola por el momento.

Espero que pronto su ánimo mejore y que Alice decida acompañarnos, me pregunto si sabe el daño que parece estarle haciendo a Shiori.

Al salir del internado, observé el cielo, aun nublado. ¿Acaso el tiempo no mejoraría nunca?

Pensé a que lugares podría ir; quizás al parque Foresta, podría encontrarme a Missit y disfrutar de otro de sus espectáculos de acrobacias, o al restaurante, seguro que Kaori estaría ahí.