Capítulo 14

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Iris

Me levante de la cama soltando un largo bostezo mire a mi acompañante y solo volví a tirarme a la cama, tenía tanto tiempo sin sentirme así de bien y no sólo lo decía porque el sexo había sido muy bien sino también su compañía me era agradable.

—No quiero trabajar hoy
—me queje mientras me volvía a levantar —pero tengo que trabajar.

Lo escuché reír, el aún se mantenia acostado boca abajo, se giro un poco para verme.

—Tu ritual de la mañana es interesante.

—No suelo ser muy quejumbrosa pero de tan solo recordar que hoy tendré horas extras me entra la flojera.

—Debe ser difícil ser médico.

—Solo a veces, hay casos donde uno tiene que dejar de lado la empatia y decir con dureza lo cruel que es la situación.

—¿Y por qué decisiste convertirte en médico?

—Eso es una buena pregunta. Sabes la respuesta más común es porque queremos salvar y ayudar a los demás.

—¿Y no es así?

—La verdad es que casi siempre es para demostrar algo.

—¿Y que es lo que quieres demostrar?

—Qué se puede lograr lo imposible.

El sonido de su celular captó la atención de ambos, Browen se levantó para tomar su celular miró la pantalla para después comenzar a buscar su ropa para colocarsela, empezando por el pantalón vaya que tiene un lindo trasero.

—Yo también tengo que ir al trabajo.

—Cierto, escuche de mi padre que estarán muy ocupados con el arreglo de una boda.

—Este tipo de eventos vuelve loca a Ana y alguien debe ayudar a tu hermano.

—Buena suerte con ello y por cierto disfrute mucho del cafe—mencioné con un doble sentido el cual el captó pues giro a verme con una sonrisa cuando terminó de vestirse.

—Podemos volver a hacerlo después, prometo llevarte a un lugar nuevo.

—Seguimos hablando del café, ¿verdad?

—Por supuesto, ¿tu no?

Bromeó antes de salir de la habitacion, bueno supongo que esto me daría mejor libertad de moverme por la situación me levante de la cama para ir a tomar una ducha, si pensaba ir con la misma ropa al menos debía ir aseada, si necesita de un cambio nuevo siempre guardaba uno en el casillero de Raquel aún recuerdo su cara de sorpresa cuando lo encontro por primera vez pero al no tener otro lugar donde colocarlo siempre debo ingeniárselas.
Una vez lista me fui directo al hospital, no tenía tiempo para regresar a casa a tomar un desayuno por lo que me conformaría por algo simple de la cafetería, sin mencionar que primero debía registrar mi llegada en la entrada principal y después regresar al área de oncología.
Entre al hospital divisando a todo el equipo del doctor Carmona incluyendo al nombra registrando también su hora de llegada al igual que Gabriel, quien coqueteaba con la chica del almacén.

Invidente amor ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora