Half Moon~ YM

El comienzo de una vida pte.2

Se encontraba en un inmenso campo de trigo, en el cual, la luz de la luna era el mas hermoso reflector de luz que alumbraba cada centímetro de aquel bello lugar, en una banca de madera, en la cual reposaba un pequeño libro, se encontraba Min Yoongi, viendo con admiración el inmenso y nocturno cielo repleto de constelaciones hermosas.

- Es malo espiar...- Susurró al sentir a unos metros de él la presencia de aquel a quien conocía muy bien.

- ¡Ah rayos!- Exclamó el menor saliendo detrás del trigo - Nunca se deja sorprender...

El mayor rió girando si mirada al menor que caminaba con un puchero hasta llegar a donde se encontraba, lo vió sentarse sobre una roca frente a él cruzando sus brazos.

- Es que haces ruido...- Explicó.

. - No es justo...

- Ven aquí...- Le llamó palmeando el lugar a su lado en la banca de madera.

El menor sonrió y se sentó a su lado, sintiendo como el mayor le abrazaba sobre sus hombros y besaba con delicadeza su mejilla.

- Te amo Park Jimin...- Le susurró.

- Yo también a usted... Lo amo...

- Entonces ya tutéame...- Pidió frunciendo su ceño - Me haces sentir un anciano...

El menor soltó una carcajada abrazándose a su torso.

- Te amo Min Yoongi...

El mencionado no pudo evitar suspirar apretando al menor mucho más hacia él, le amaba, añoraba alargar aquel momento para toda su vida, pero, sabía que aquello no era real, sabía que no era esa la realidad en la que debían estar, sabía que aquello no era más que un sueño.

- Despiértate...- Escuchó decir a Jimin en un susurro - Te he estado esperando... Despierta ya...

🌙

Sintió un rayo de luz blanco chocar contra sus párpados haciéndolo fruncir el ceño, giró su rostro un poco y comenzó poco a poco a abrir sus ojos, parpadeando varias veces para acostumbrarse a la claridad mientras despertaba por completo.

Respiró profundamente analizando aquel lugar, y recordó al instante el sueño que acababa de tener, su garganta se cerró cuando a su vez, recordaba lo que había pasado, el disparo, los gritos de Jimin, el doloroso viaje...

Cayó en cuenta rápidamente recordando que se encontraba en un centro de salud, tragó en seco mirando a sus lados con algo de temor, sin embargo, todo el miedo se esfumó, cuando a su lado derecho, sobre su mismo colchón, el rostro de Park Jimin se robaba por completo su atención.

Se encontraba sentado en una silla, recostando sus brazos y cabeza sobre la cama, dormía tan tranquilamente que no se había dado cuenta de que el mayor había despertado, pero esto no le importó, ya que ahora podía decir con firmeza que Dios les había bendecido en grande.

Porque haber sobrevivido para despertar y verlo a su lado, solo podría haber sido obra de Dios... Y ahora eso era más que seguro.

Sonrió sintiendo sus lágrimas rebosar en sus ojos, acarició con delicadeza el acanelado rostro del menor, confirmando que efectivamente era él, y que no era una alucinación, aquel roce hizo que Jimin suspirara abriendo poco a poco sus ojos, parpadeo un poco haciendo que el mayor se llenara de ternura al ver aquel perfecto y dulce ser despertar.

El menor elevó un tanto desorientado la mirada hacia el rostro del contrario, el cual sonreía suavemente, le costó un par de segundos caer en la realidad cuando de un respingo abrió mucho mas sus ojos y sus manos cubrieron sus labios.