Mi chica inteligente -- [CACHE]

18. Laura Villa

Pov Calle 

Por fin pude comprender que era lo que sucedía con Poché, con respecto a su comportamiento.
Gracias a que le otorgue el beneficio de la duda y decidí escucharla, pude atar cabos sueltos dentro de mi cabeza.

Ella se sentía herida, y encerrada, la muerte de su madre y su hermana le dejaron marcas, y unas que todavía le duelen, así que pensó que lo mejor para ella era mantener distancia de todo aquel que intentara entrar en la burbuja que ella misma creo.
 Solo que lo hizo de manera que a quienes nos importas saliéramos lastimados (O tal vez fui solo yo).

Lo peor que pude hacer fue darle tanto poder sobre mi.
Me alegra de cierto modo que intente cambiar, pero me asusta que se le olvide, y las cosas vuelvan a ser como eran hace una semana.

No me ha importado desaparecer de la vida de otras personas, pero no quiero que ella desaparezca de la mía.

Tan pronto entramos a su casa me despedí y me fui directo a la cama. No quiero hablar, no quiero interactuar con nadie en este momento. Es cierto que estoy un poco feliz por lo recién acontecido, pero esto es demasiado, demasiado para mi.

Todas la emociones que me invadieron solo se mezclaron y me confundieron, ¿Es posible sentirse triste, feliz, furiosa, decepcionada y sin ganas de nada al mismo tiempo? Porque es así como me siento, y me encantaría saber que no soy la única que se ha sentido de esa manera. 

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Como era de costumbre no pude pegar el ojo en toda la noche, las noches de insomnio eran cada vez más frecuentes.

A la mañana siguiente escuche a Poché mover cosas en la cocina, dejar cosas caer, y luego maldecir.  No me quiero levantar, no quiero ir a ningún lado, no quiero que la vida me de más golpes, me parecer mejor fundirme con esta cama esperando tener la sensación de estar cayendo y despertar de todo esto, volver a lo que era antes.

Pov Poché

Como primera cosa por realizar el día de hoy antes de hacer acto de presencia nuevamente en el instituto, era cocinar un rico desayuno para conmemorar el nacimiento de la nueva Poché, después de varios fallos me di cuenta que era tarde y que tendría que dejar la cocina para otro día, seguro comería algo en la cafetería.

Como alma que lleva el diablo corrí a vestirme.
Entendí que si Daniela no se había levantado debería ser por algo. Entre a la habitación donde se encontraba. 
Las ojeras que tenía cubrían una gran parte de la piel bajo sus ojos, tan pronto crucé el umbral noto que estaba allí, me miró, y como so no le importara desvió nuevamente su atención al techo.

-¿Daniela?, ¿Te encuentras bien?- cuestioné quedando de pie frente a la cama. De nuevo me miró, pero esta vez apretó los ojos, obligándose a no abrirlos.

-Ya no sirve de nada mentir- Un sollozo salió de su boca casi inaudible.

-¿Que ha pasado?- Me senté a su lado.

-Mi vida se quiere caer a pedazos, y ya no queda nada que la detenga- También se sentó. Limpió un par de lagrimas y se concentró en el edredón.

Sin pesarlo dos veces la rodee en un abrazo que pretendía ser cariñoso, pude notar como se tensó, aún así lo correspondió.

-Esta vez si quiero ayudarte, Dani- Susurré.

No quiso responder, pero supe que lo agradecía.

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Después de mucho rogarle a Daniela para que se levantara y viniera conmigo a estudiar, se me hizo tarde, ella se enojó sin aparente razón, y tuve que salir corriendo porque ya había perdido parte de la primera clase.

Al llegar noté que alumnos alumnos no entraron a clase (eso era bastante usual) Pero hoy eran más que siempre, aquellos alumnos estaban reunidos en un gran circulo que cada vez se cerraba más y más.
Como pude me acerque y sin resultados, me empiné para ver de que se trataba tanto alboroto.

-Pochésita- Hace mucho que no la escuchaba y hasta ahora agradecía que haya sido así.

-¿Que tal, Carolina?- Pregunte afanada porque se fuera.

-Nada nuevo- Acarició las puntas de mi pelo- Hace mucho no hablamos, ¿Te olvidaste de mi?

-Lamento decirte que sí- Quité su mano de mi pelo- ¿Sabes porque tanta emoción?

-A llegado una nueva chica, dicen que es bastante bonita. Yo no lo creo. Laura Villa dicen que es su nombre.

-Uhhh, pero que tarde es, ya perdí mi primera hora de clase, y no quiero perder más- Me alejé poco a poco tratando de evadir a la multitud.
Pues el escape se vio interrumpido porque choqué con alguien que iba caminando de la misma manera que yo.

-¡Auch!- Se quejo cuando al mismo tiempo que yo, cayó al piso- Lo siento, lo siento tanto- La voz una chica me endulzó el oído. Me levante como pude y gire mi cuerpo furiosa.

-¡¿Que carajos...- Me veo en la necesidad de admitir que es bastante bonita. Su cara de cachorro arrepentido me ablandó el corazón- Yo... También lo siento, no vi por donde iba.

-¿Estas bien?- Preguntó sacudiéndose el polvo.

-Sí. claro, no te preocupes. ¿Y tú?

-Sí. Laura Villa- Se presentó, extendiendo su mano, la cual tomé gustosa.

-María José Garzón.

Solo sonrió. Mentiría si dijera que no es de las chicas más lindas que he visto. 

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Confieso que este capitulo planeaba escribirlo unos capítulos más adelante.

¿Tienen alguna confesión? Dejadla aquí :3 ----->

No había tenido tiempo de actualizar con esto de la escuela, pero creo que a he vuelto, y cuando pueda les escribiré uno nuevo ;3

Vazaec 🤠