Anoche yacía durmiendo y desperté de la nada, un bicho dentro de la habitación y una captura que resultó en nada, el reloj marcaba las tres y algo de la madrugada, mientras mi cuerpo aún no procesaba estar despierto, y volviendo a la misma cama, suspiré algo hambriento.
Mis ojos comenzaron a entrecerrarse, mientras la programación de mi cerebro ordenaba tomar el móvil para terminar en las historias de instagram, una fue necesaria para no tomarla en cuenta, luego terminé por procesarla y mi sueño quedó en el olvido.
Pronto te encontré entre letras y cada vez que volvía a leerte no lo creía posible, mientras inevitablemente mis ojos se llenaban de lágrimas y mi cuerpo se comenzaba a tensar. Leí una y otra vez cómo te sentías, tratando de descubrir si era una broma, un experimento social o algo parecido, pero todo me indicaba que era una despedida.
"Me rindo" decía la última frase, aquella frase que no salía de mi cabeza y me hacía divagar, pensando en lo que podría hacer para ayudar, hasta que volví a ver la hora y aquella historia decía "hace dos horas".
La ética con la moral se peleaban dentro de mi ser, pensando en lo que podría decir o hacer, pero terminé dándome cuenta que era demasiado tarde. Tarde, era tarde, si algo había pasado ya no podía hacer nada, no podía hacer nada y terminé por quedarme llorando sobre mi cama, analizando la propia vida y la de los demás, lo bueno y lo malo, y lo que no se debe hacer jamás, ¿Pero qué es bueno si en realidad esta vida puede ser una mierda?
Definitivamente no soy el mejor dando consejos, no tengo palabras para un momento así, la vida cuelga de un hilo y es inevitable tratar de no seguir, quizá llamar a tu madre sería una opción, pero la verdad es que ya no podía hacer nada y terminé por abrazarme a morfeo, perderme entre las sombras, mientras escuchaba música que probablemente no era la indicada.
Mi corazón palpitaba de una forma extraña, me anticipé a todo lo que podría haber pasado y hasta pensé en modificar mi horario, mi agenda y hasta mi vida para estar ahí si es que el momento lo planteaba necesario.
Mi cuerpo estaba temblando, y si no temblaba, cada vez se ponía más tenso, porque traté de ponerme en tu lugar y aunque te entendía no podía terminar de hacerlo, Ekai también llegó a mi mente, todos estamos unidos por algo y a pesar de que para mi aquello no es una opción, trato de ser valiente por cualquiera que ya se rindió.
Te dije que tenía muchas cosas que decirte, tantas que ni siquiera sabía como decirlas, mi mente estaba colgando de un hilo luego de leer tu historia, esa misma que decía "hace dos horas", y simplemente no había palabras indicadas, las perspectivas son diferentes, puedo y trato de entenderte pero se me hace difícil, y sé que la vida a veces va cuesta abajo, porque finalmente no todo es purpurina y estrellas.
Y a pesar de aquello, de la noche de lágrimas corriendo, de música innecesaria y de pensamientos estúpidos, me alegra haberte encontrado en la mañana, entre líneas que aún no puedo describir, que de alguna forma me devolvieron el alma al cuerpo, para poder descubrir y principalmente entender que nuestra vida es demasiado frágil como para desentender lo que les pasa a los demás, que todos merecemos brillar y que de alguna forma se puede ayudar.
Sé que en este momento no pasó, pero sé que tampoco debo descartarlo para el futuro, cercano o no, de ti, de mi, o de quién sea, porque en esta vida todo es probable.
Solo déjame decir que me alegra verte un día más, que nunca te voy a olvidar y que te quiero más de lo que podemos hablar.
-. Con cariño de este corazón frío que dejó la coraza a un lado, por todos los que ya no están, y están apagándose en este mismo instante, por ti y por mi, que la vida sigue, aunque sea sólo por un instante.
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Cartas para el viento
RandomEn ocasiones dije que lo mejor sería escribir letras que se esfumasen con el tiempo, y así como lo hicieron, estas cartas se perderán, dejando de lado un solo destinatario. -. Para quién sea, porque probablemente nunca serás tú. -. Las fechas no est...