blush | markhyuck.

amanecer.

donghyuck despertó.

y lo primero que sus ojos vieron fué el rostro de mark, el cual tenía en frente.

y muy cerca.

parpadeó para ver mejor, y sonrió levemente al ver bien la imágen que tenía en frente.

¿por qué mark tenía que ser tierno hasts para dormir?

miró hacía abajo.

las sabanas estaban por sus caderas, dejando descubierto el torso. donghyuck notó que tenía su mano en la cintura del canadiense, aprovechó y la bajó.

desde que lo vió de esa forma, quiso tocar los cuadraditos que adornaban su bonito cuerpo.

puso sus mano sobre estos, sintiendo la gloria de poder hacerlo.

- no toques allí. -se le escuchó decir a mark, aún con los ojos cerrados-

a donghyuck casi le agarra un infarto.

- ¡pero! -mark puso sus dedos sobre sus labios, callandolo-

abrió un poco los ojos, aún adormilado, y miró directamente los del contrario.

ver cómo lo miraba de esa manera le producía un cosquilleo en el estómago a donghyuck.

- estás tan cerca que podríamos besarnos.

sonó en la cabeza del pelinegro, golpeandose a sí mismo al escucharse.

- ¿que sucede? -preguntó el moreno sin entender su acto-

- deja de tocar mis "abs". -dijo deletreando las letras-

- ¡ya! ¡esta bien! -lo miró como un bebé enojado haciendo que este riera-

el canadiense frotó sus ojos, y seguido a aquel acto se levantó, estirándose.

se puso de pie y tomó alguna playera tirada en el suelo, poniéndosela y dirigiéndose a la puerta.

- ¡espera! -dijo hyuck antes de que abriera la puerta y este lo observó- tengo que darte algo

- ¿que cosa?

- ven aquí. -el moreno palmeó el lugar a su lado-

mark se sentó a su lado y lo observó sacar algo de su bolsillo.

- conseguí el bálsamo de sandía que tanto querías. -le dijo con una sonrisa, mostrandoselo-

el canadiense abrió su boca sorprendido.

- ¡muchas gracias donghyuckie! -respondió con emoción- me lo pondré ahora -sacó la tapa, pero la mano de hyuck en su brazo lo detuvo-

- sabes lo que pasa cuando intentas usar algo relacionado con el maquillaje -dijo el moreno y mark lo pensó- te lo pondré yo.

- oh, esta bien. -contestó el canadiense-

donghyuck tomó el bálsamo y comenzó a ponerlo sobre los finos labios de mark, el cual miraba el proceso.

mientras lo hacía, recordaba las veces en las que el canadiense decía que necesitaba algo para que sus labios no se resequen.

y pensaba en otra cosa en vez de un bálsamo.

pero lamentablemente terminó comprándole eso.

ya casi terminaba, aunque el moreno realmente los veía apetecibles y no paraba de relamer los labios propios.

y mark se dió cuenta de esto, lo cuál lo ponía nervioso, y más cuando el menor se acercaba más de lo necesario.

- listop. -dijo hyuck aún con la mirada en la boca contraria-

mark sonrió levemente y el menor acercó la nariz a su boca, oliendo el aroma a sandía.

- delicioso. -dijo para luego ponerse de pie y salir de la habitación al oír el llamado de la madre de mark-

mark se quedó algo confundido pero imitó al menor y salió de la habitación.

cuarto capítulo.!!