01 | la lista.

1K 61 4
                                    

Leah.

Un día, Christian Sullivan, mi ex novio, solo lleva aquí un día y solamente se ha dedicado a hablar de mi en cada pasillo de cómo se encargó de enamorarme e ilusionarme haciéndome perder el tiempo durante siete meses cuando todo era una apuesta.

No era como si yo pasara desapercibida en la escuela, tenía un buen círculo social desde que llegué pero de repente la mayoría de las personas me miraban y señalaban por las historias exageradas del chico nuevo.

Y para ser sincera, él estaba agotando mi paciencia.

No solo vino a recordarme lo mal que la había pasado con él y andar divulgandolo por todas partes sino también venía a destruirme, más de lo que anteriormente me había hecho. Humillandome y avergonzandome.

—¿Estás bien?

Me pregunta Kay a mi lado probablemente preocupada y yo continuo mirando al imbecil coqueteando con una chica a unos metros más de nosotras.

—Si mi ex me está avergonzado con cada grupo de personas a quién se encuentre, exagerando las cosas y hasta diciendo mentiras, entonces si, estoy bien.

La escuchó soltar un suspiro y se posiciona delante de mi con una mirada seria pero comprensiva, impidiendome mirarlo.

—Oye, él no merece la atención que le estás dando ahora.

—Si pero...

—Entiendo que todos están creyendo lo que él está diciendo sobre ti desde ayer que llegó pero ¿acaso importa?—se encoge de hombros.—Eres Leah Eastwood, y no viniste aquí para que él volviera a hacerte sentir mal otra vez. Demuéstrale que no te importa y sería mejor si de una vez por todas lo hicieras pagar.

Ya intenté una vez hacerlo pagar y no me funciono para nada, solo conseguí más humillación y fue por eso que terminé huyendo de mi anterior instituto.

—¿Y cómo haré eso? Él otra vez se está saliendo con la suya en querer hacerme la vida imposible y solo puedo pensar en que no quiero que todos me den la espalda y terminé huyendo de nuevo por el miedo.

La rubia coloca una pequeña sonrisa y pone una mano en mi hombro.

—Nosotros no somos como tú anterior instituto, y créeme que ninguna de las chicas ni mucho menos yo te daremos la espalda.

Ya no me costaba confiar en eso, Kay y mis demás amigas han demostrado ser leales y muy buenas personas, solo ella tenía que decírmelo para recordar todos los buenos momentos y también los malos en las que las necesite y ahí estaban para mi.

Y ella tenía razón, Christian por fin tenía que pagar porque yo ya no me dejaba de nadie ni tampoco me dejare de él aunque me haya sentido vulnerable y cobarde cuando me entere que ahora estudiaría aquí.

—Gracias Kay.—le digo con una pequeña sonrisa y nos fundimos en un abrazo.

Un abrazo lindo y sincero que hace muchísimo tiempo necesitaba y finalmente encontré el lugar, o más bien mi lugar, donde por fin encajaba y Christian no me arruinaría nada de esto.

—Enfrentalo, bajalo de esa nube.—dice mientras se separa de mi y me observa.—Y la mejor manera de herirlo es demostrandole que ya no te importa nada de lo que sucedió antes ni tampoco ahora, que estás feliz. Porque a él le hace sentir poderoso en ti lo infeliz que te hizo, tus malos recuerdos y siendo una total bitch lo dejará por fin en su lugar.

Sonrió ya que nuevamente Kay tiene razón, y no me lo hubiera dicho si no le hubiera hablado de mi historia con él, al menos no algo tan preciso como eso.

you were good to me↳corbyn besson.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora