04 | facilitar las cosas.

737 62 4
                                    

Leah.

Está a punto de darme un ataque de nervios.

Mis manos tiemblan y mis piernas también, siento que mi corazón se saldrá de mi pecho en cualquier momento y estoy comenzando a sentir esta ansiedad.

En toda la tarde desde que llegué a mi casa ni siquiera me pude concentrar para hacer mis tareas, tenía la cabeza en mi mundo pensando en quién se supone que será mi novio falso para convencer a Christian y como podría convencerlo con toda esa mentira.

Y en la noche, nuevamente me estaban dando esos ataques de ansiedad ya que sabía que si Christian sabía que le había mentido me destruiría por completo. De nuevo ganaría y yo realmente quiero regresarle todo lo que me hizo y de hecho no hay nada mejor que el karma pero ahora realmente quiero hacerlo yo misma. Y es que la simple idea de que él vuelva a avergonzarme delante de todos, si en mi mente no la soporto, menos lo haré en la realidad.

Ya no quiero pasar por ninguna otra depresión ni mucho menos quiero que me den la espalda.

Y ahora estoy a punto del colapso mental ya que tengo un par de ideas pero no sé si estén bien y no quiero traer más problemas con ellas y además de eso tengo que planearlo bastante bien pero estoy tan estresada y frustrada que todo se me hace cada vez más imposible.

En la mañana cuando llegue tenía mucho miedo de encontrarme a Christian pero gracias a que había llegado más temprano de lo normal, no lo vi por ningún lado. Y durante el resto de las clases, me escondía entre la gente y lo buscaba para evitar pasar cerca de él.

En el almuerzo me escondí en el aula que comparto con las chicas y todo el tiempo estuve bastante miedosa y nerviosa ya que por nada del mundo quería encontrarmelo ya que no tenía nada para demostrarle. Y es que si tengo las ideas pero debido a que me he estado escondiendo no he podido hacer nada ni tampoco me puedo arriesgar.

Y las chicas, me conocen y saben que estoy actuando muy extraño pero evito sus preguntas.

Ahora, estoy en clase de deporte, ¿y cuál es la peor parte? Que Christian esta del otro lado del campo entrenando fútbol y ya ha notado mi presencia, logrando ponerme más nerviosa de lo normal. Y es que estoy segura de que apenas terminé, él vendrá a mi y será peor porque todavía no tengo nada.

Dios ¿porqué tuve que haberle dicho que tengo novio? ¿Acaso no se me pudo ocurrir otra cosa?

—Tierra llamando a Leah.

Kay me saca de mis pensamientos y continuó trotando junto con la rubia a mi lado mientras no podía dejar de observar a Christian, sintiendo que en cualquier momento vomitaria.

—¿Qué pasa?

—¿Porque no dejas de ver al imbécil de tu ex?—cuestiona confundida.—Y estás muy pálida para estar corriendo y sudando.

Observó a Christian a lo lejos que no deja de correr por todo el campo de fútbol llevando el balón en sus pies utilizando el uniforme. Y también todos los chicos de béisbol han llegado, entre ellos los cinco, sobretodo el rubio.

—¿Hola?—escuchó nuevamente a Kay y vuelvo a observarla después de darme cuenta de que otra vez la estaba ignorando.—¿Qué es lo que te sucede? ¿Qué tienes?

—No, nada, lo siento, solo estoy muy distraída pero ya, no pasa nada.—la intento convencer y continuamos trotando apartando mi mirada de esos dos.

Todo lo que quería era que la clase acabará pronto y si tenía suerte, si Christian no se me acercaba podría irme más pronto sin tener que demostrarle nada ya que me daría más tiempo de planear todo mejor.

you were good to me↳corbyn besson.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora