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Esmeralda no me quiere ver por el trabajo hasta el lunes y como las dos a tercas vamos a la par no quiero llevarle la contraria respecto a eso, así que respirare me lo tomare con calma y ya que estamos pues me acostumbrare a vivir con Tsukiyumi en esta semana

A partir de ahora no usare su nombre occidental de Isabel salvo que la situación lo requiera sino yo misma me hago un lio llamándole de una manera o de otra y ella después de todo quiere que la llame con el nombre japones que le ha puesto mi abuela

Pues bien, el lunes por la noche ya pasé la primera noche en la nueva casa, la conocía desde fuera pues no está tampoco demasiado lejos de donde estaba hasta ahora y pase con Tsukiyumi unas cuantas veces por aquí, pero este verano anterior la tenían cerrada y después de lo que paso con Ovidio muchas menos ganas tuvieron de venir, pero en fin parece que ahora será más que una vivienda de verano y nosotras dos nos quedaremos aquí

A mí ya se me hace que es la segunda vivienda en que me cuelo a vivir por eso le dije a Tsuki que contribuiré con mi trabajo en los gastos del hogar lo más posible sino casi que prefiero volver con mi abuela y alquilar para mí un piso en cualquier momento, pero ella ha aceptado que contribuya con los gastos y diría que hasta le ha gustado que me haya ofrecido

Otra de mis sugerencias es que, aunque la casa está ya amueblada, si me deja darle un toque japonés a la decoración y su respuesta fue, en tu cuarto ponlo como te dé la gana, pero el resto el resto de la casa por ahora déjala como esta.

Bueno algo es algo, ya iré pensando en cómo remodelar mi cuarto y si, cada una tenemos el nuestro cuarto y eso me gusta bastante, luego hay cuarto mas que tiene una cama de matrimonio, pero ese lo vamos a dejar como esta, de momento

Ahora es martes por la mañana ella se ha ido a trabajar y a mí me da una envidia terrible pues precisamente sola es cuando más vueltas a la cabeza le doy así que me pongo mi kendogui, ósea mi ropa de artes marciales tipo kendo que es completamente rojo. Así lo encargué pues desde que comencé a despertar el rojo es mi color. También encargue algunos kimonos, en varias combinaciones, pero siempre llevan algo de rojo, ahora mismo por lo menos en privado muchas veces prefiero vestir ropa tradicional, así es ahora es mi sentir

Me puse a entrenar en el jardín, primero medito y busco la calma pues es lo más importante, entrenar con los pensamientos más relajados posibles, luego hago tai- chi y después es cuando comienzo más físico, más intenso

Y ahora también tengo mi propia espada, una katana que me llego desde Japón por petición de mi abuela, yo la verdad le pedí una nodachi que es similar, pero a dos manos y más grande, pero me dijo que no, que debía utilizar una más común y que además es con la que he aprendido y me siento más cómoda y en eso tiene razón. Además, si vuelve a haber enfrentamientos es mejor no improvisar, y eso, después de hacer una práctica de movimientos de lucha sin el arma la tomo y comienzo a practicar con mi espada

Desde que tengo más dominio del ki siento que podría trasmitirlo a través de la espada, pero las veces que lo intentado me ha salido mal, incluso me queme un poco las palmas de las manos pero no tengo ni una sola cicatriz debido a que Tsuki ha aprendido muy bien a usar poderes de curación que si no haber como posaba yo para las fotos jeje

Bueno voy a intentarlo de nuevo, el proceder es el mismo concentro el ki desde el pecho hasta que fluya por mis manos, esta katana la puedo agarrar con una o con dos manos, esta vez preciso que sea con dos, ya siento el ki fluir hacia el arma, uf el filo se está poniendo rojo, esto creo que no va muy bien, ¡Riiiiiiiiing! ¡Auch! Otra vez quemaduras en las manos, no es mucho, pero ¿Quién coño llama al timbre ahora? Abro la puerta y veo a un tipo bajito trajeado mirándome de arriba abajo, aun llevo mi kendogui y me he vendado las manos, me dice

Ōkami 狼Donde viven las historias. Descúbrelo ahora