No podemos aceptar este tipo de solicitud. Lamentamos la situación con tu familia, pero no es un motivo para renunciar al puesto de Hokage - declaró Tsunade con voz firme siendo acertada por los demás del concilio.
Entonces tengo una condición -declaró el rubio con voz firme.
Naruto entró a su hogar en silencio, dejó sus zapatos en la entrada y avanzó despacio hacia el comedor. Nadie se encontraba allí para recibirlo, no era de sorprenderse.
Ya estoy en casa -logró decir, sin esperar respuesta.
Unas risas infantiles retumbaron en sus oídos y Naruto miró por el gran ventanal del dojo como en el patio que daba al lago se encontraba Sasuke con ambas niñas jugando. Sonrió con ternura y avanzó hasta ellos.
Abriendo el ventanal corredizo, llamó la atención de su esposo y su hija mayor.
- ¡Papá, bienvenido!
La dulce voz de Sarada lo embelesó y se sintió en una especie de burbuja cuando su niña corrió hacia él y lo abrazó fuertemente.
Era como volver al pasado donde ella tenía 5 años y se alegraba con su presencia.¿Ahora era igual, todo había vuelto a ser como antes?
Con una gran sonrisa correspondió al abrazo de la azabache y la cargó en brazos, sintiendo tranquilidad al sentir su olor aún a niña pequeña.
- Sarada...
- Lo siento, papá. Espero me puedas perdonar -confesó con un puchero en sus labios.
Naruto abrió los ojos sorprendido, miró a su esposo quien mantenía una cálida sonrisa.
- No hay nada que perdonar, creí que ya habíamos hablado sobre eso, pequeña -dio un beso en su frente- No sabes cuánto extrañaba tus abrazos.
Sarada abrazó por última vez a su padre y devolvió el beso en la mejilla para después soltarse e ir donde su pequeña hermana y cargarla frente al rubio.
- Mira, Hima. Es papá -dijo con ternura la pequeña hacía la bebé, quien miraba atenta al rubio- Anda, dile lo que aprendiste.
Naruto movió su cabeza hacia un lado, sin entender.
- Di, papá.
- Pa..pá -pronunció Himawari con dificultad, aquella palabra le costaba- ¡Papá!
- ¡Su primera palabra! -tomó a la bebé en sus brazos y la llenó de besos, haciendo que la pequeña riera.
Sasuke se puso en pie yendo hacia su esposo y le dio un casto beso en los labios al apuesto rubio.
- Estás tan hermoso como la primera vez que te vi -alagó el Uzumaki acariciando la cintura contraria con su mano disponible.
El Uchiha solo rodó los ojos y gracias a su pelo lacio y un tanto largo, escondió un culpable sonrojo.
- ¿Y Boruto? -preguntó meciendo a su hija.
- En su habitación, no ha querido salir en los últimos 2 días -bufó el Uchiha acariciando el cabello de Sarada que miraba a ambos padres- Por cierto, ¿cómo te fue con el concilio?
Naruto suspiró triste- No aceptaron mi renuncia, pero puse una condición.
- ¿Condición?
- Estar mas tiempo en casa y solo para eventualidades ir a la oficina -respondió con una sonrisa.
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Stay Away - NaruSasu
FanfictionDonde Naruto al fin cumplió su sueño de convertirse en Hokage y tener la familia que tanto deseó, sin embargo no creyó que esta lo despreciara como en el pasado. -Angst, Mpreg.