JiMin es un niño diagnosticado con Hafefobia. JungKook no sabe por qué tiene que jugar con otro pequeño de mejillas gorditas que ni siquiera conoce y además parece tenerle miedo.
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• COMPLETA ✔❗
• C...
JiMin tenía una mochila con su móvil, un sándwich de mermelada de moras y una pequeña botella de jugo de manzana.
Había quedado con Taehyung para acompañarlo a ensayar.
JiMin jamás había salido sólo de casa, pero ahora se veía en la obligación de hacerlo porque su madre había ido a trabajar y JungKook estaba ocupado en sus exámenes de admisión para la Universidad.
Así que se subió al tren solito y luego caminó hasta dar con la dirección que le había dado Taehyung.
Se sintió orgulloso cuando llegó. Nada mal para un niño de 16 años; JiMin sonrió feliz.
Subió en el ascensor y dio con una sala que decía "Dance Practice".
Vio a Taehyung en cuanto entró al lugar, estaba con otras personas que creía haber visto en fotos del de cabellos castaños. También estaba Hoseok, uno de los amigos de JungKook.
— ¡Minnie, llegaste! Chicos, este es JiMin, del que les hablé.
Luego de que lo saludaran, con algo de distancia para el bien del menor, Taehyung volvió a dirigir su mirada a JiMin.
—Los chicos quieren verte bailar, les mostré el vídeo que grabamos hace unos años en la escuela. Pienso que deberías ser parte de la academia.
JiMin lo pasó muy bien ese día, pero aún recordaba sus piernas temblando cuando la música sonó y todos le miraban.
Llegó a casa en la tarde, con medio sándwich en la mano y sus audífonos puestos. Su madre se alegró de que JiMin tuviera más amigos ahora.
JungKook llegó poco después para poder estar un rato con el menor.
— ¡JungKookie!
La madre de JiMin saludó a JungKook.
—Este chico es todo un hombrecito ya, fue sólo al centro y volvió a casa sano y salvo.
JungKook sonrió feliz ante la noticia.
JiMin le abrazó. Le dio mucho cariño y finalizó el patrón de actos con un:
— ¡Me gusta mucho bailar!
JungKook pensó que JiMin había encontrado al fin lo que lo hacía verdaderamente feliz. Cuando su madre fue a la cocina, JungKook le besó los labios, las mejillas y la frente.
—Felicitaciones, precioso.
—Tus pasitos de pingüino funcionaron, Kookie.
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