Era bien sabido que JiMin era el chico más guapo de todo el colegio, todos adoraban la personalidad fresca, amable y tierna del ahora rubio, sus rasgos faciales eran finos y las líneas de su cuerpo también.
Eso era un gran obstáculo para YoonGi.
—¿Escuchaste que Jackson Wang el atleta estrella de nuestro colegio también está enamorado de JiMin?— las orejas del pelinegro reaccionaron como antenas y siguió escuchando aquella conversación.
—Quisiera morir y renacer en un cuerpo como el de JiMin, tiene tanta suerte ¡Es tan hermoso que no solo chicas se fijan en él!— la chica apoyó su cabeza contra su pupitre haciendo pucheros.
—Tiene club de fans y pronto audicionará para una agencia, su destino es la grandeza— la otra chica también apoyó su cabeza contra el pupitre.
Era cierto, JiMin tenía tantos talentos, sus imperfecciones eran casi nulas, él lo sabía más que nadie porque creció junto al rubio.
YoonGi tenía autoestima, no se menospreciaba, era cierto que no era tan bello como lo era JiMin pero tampoco es como si su rostro fuera deforme, él también era bien parecido y consideraba que podría hacerlo feliz el resto de su vida.
Tenía que decírselo pronto antes de que alguien lo haga primero pero eran tantas las personas que también amaban al de mejillas regordetas que el imaginarse una respuesta positiva del menor era del 0.000001%
Esto iba a ser una masacre.
—Solo tenemos quince años pero me siento anciano— TaeHyung se dejó caer al suelo siendo regañado por el profesor de educación física —¡Esto es inhumano! ¡Yo también tengo derechos!— su amigo era arrastrado por sus compañeros hacia el siguiente circuito, todos debían concluirlo sin excepción.
YoonGi toleraba las clases de educación física, no eran sus favoritas pero la compartían con otra clase, con la clase de JiMin.
El pelinegro vió como JiMin se atoraba al trepar un muro, sus instintos le gritaron que vaya a ayudarlo pero cuando movió una pierna alguien ya le había ganado.
—Gracias Jackson-hyung— el chico alto cargó a JiMin como princesa y lo ayudó a bajar del otro lado.
YoonGi sentía celos —¡Cuidado con el balón!— y eso fué lo último que escuchó antes de aparecer en la enfermería junto a un TaeHyung preocupado.
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¿Y si me declaro a mi crush?
FanfictionYoonGi ha estado enamorado de JiMin desde el jardín de infantes, su lindo vecino hizo latir su corazoncito en el momento en el que sus ojitos se hicieron una línea al sonreír. YoonGi quiere decirle que le gusta pero tiene que pasar por bochornosos m...