YoonGi ha estado enamorado de JiMin desde el jardín de infantes, su lindo vecino hizo latir su corazoncito en el momento en el que sus ojitos se hicieron una línea al sonreír.
YoonGi quiere decirle que le gusta pero tiene que pasar por bochornosos m...
—Y eso fue todo lo que vi— mencionó TaeHyung dando su reporte del día anterior.
—Quizás no fue ella aunque la tendremos en la mira. ¿Pudiste ver su rostro?
—Solo vi su cabello, al menos 50 chicas más deben tener el mismo peinado y color pero de seguro siempre espía a Minnie en la hora del almuerzo así que hoy la veré mejor.
—Gracias Tae ¿Alguien más vió algo sospechoso?— Mark le dió un golpecito en el brazo a Jackson.
—Dile lo que viste WangWang— Jackson asintió y comenzó a hablar.
YoonGi no podía creerlo.
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—Minnie, mamá cosió tu nombre en las toallas para que te las devuelvan por si se pierden— Mentira, lo había hecho él y se pinchó con la aguja muchas veces.
—Quedaron hermosas hyung, dale mis agradecimientos a tu madre— YoonGi sonreía enbobado.
La voz del profesor de deportes se escuchó llamando a todos para comenzar la clase y ambos tuvieron que separarse.
Después de un arduo esfuerzo YoonGi se dejó caer al suelo como siempre siendo acompañado por su mejor amigo pero su descanso se vió interrumpido por Jackson.
—¡Min, la toalla de JiMin ya no está!— YoonGi y TaeHyung se levantaron de golpe y comenzaron a buscar por la cancha.
La clase había terminado y los demás se habían ido a los vestidores, no había rastro alguno de la toalla.
—Hyung, no te preocupes, aún tengo la de ositos— el rubio le sonrió a su mayor y se fue a cambiar.
—YoonGi, vamos a cambiarnos, se nos hará tarde para la siguiente clase— suspiró cansado y fue con el castaño a los vestidores.
Ya vestidos comenzaron a caminar junto a la multitud por los pasillos de la institución.
—¡Ahí! ¡Tae, es la toalla de Minnie!— el pálido comenzó a caminar con prisa empujando a su paso a algunos estudiantes, sus ojos no mentían, esa tela amarilla que sobresalía de aquél bolso era la toalla de patitos, incluso se podía observar el bordado "JiMin" que el mismo hizo.
Al final no pudo alcanzarla, ahora sabía que el ladrón de toallas era una chica.
—Velo por el lado amable hyung, al menos ya tenemos una vaga idea para comenzar a buscar pero todavía hay algo pendiente, tus rivales no se van a eliminar solos ¿Sabes?— su amigo de sonrisa cuadrada tenía razón.
—¿Quién es el siguiente?— pronunció sin mucho ánimo.
—"La" hyung, es "La siguiente"— buscó en su mochila y sacó el papel que contenía los nombres y fotos —SeulGi, creo que está en el aula de JiMin, hoy sacaré información de mi hermano y mañana comenzamos.
