Capítulo 11. Aventura en el centro recreativo.

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La mañana comenzó, con la rutina ya cambiada, Arturo se fue a trabajar pero antes de irse, revisó a las bebés y les cambio su pañal; lo que sí fue un poco raro fue que cerca de las 4:00 am, ambas niñas se despertaron llorando y los papás reaccionaron, cuando se acercaron vieron que ambas se encontraban con hambre.

Así que les prepararon dos biberones de leche tibia y con la misma se quedaron dormidas nuevamente.

Arturo, por alguna extraña razón sentía que algo ya no estaba bien del todo, pero decidió pasarlo por alto.

Ya cerca del mediodía, Claudia recibe una llamada.

Claudia. Bueno, si dime que paso Julia (suegra de Claudia).

Julia (suegra de Clauida). Disculpa, querida. Podrías venir a buscar a los niños, están muy inquietos y no solo eso, me acaba de informar mi club que tenemos un viaje programado y salimos hoy en la tarde.

Claudia. Claro, de hecho te iba a marcar para decirte que los preparas ya que en la tarde los tengo pensado llevar al club recreativo.

Julia. Sí por supuesto, a qué hora pasarías por ellos?

Claudia. Como a las 3

Julia. En ese caso, te los dejo listos, con su pañalera y todo.

Claudia. Gracias.

Martha. ¿Quién te marcó?

Claudia. Era mi suegra, me acaba de decir que se va de viaje y no va a poder cuidar a los gemelos, hermana segura los puedo traer?

Martha. Claro, de todas maneras ellos todavía están bebés. No van a recordar nada de todo lo que vivan de este reto.

Claudia. Si tú lo dices; bueno voy a ir a ver a las niñas.

Martha. Claro.

Al entrar Claudia a la sala, vio que las niñas estaban jugando tranquilas con sus peluches, pero sintió el típico olor de pañal sucio.

Claudia. Hora de un cambio.

Luego de revisarlas y cambiarlas, les dio la merienda y un poco de leche de pecho, ahora su estómago ya se había acostumbrado a la leche y no protestaron. Pocos minutos después ambas se durmieron.

Ya cerca de las 2 de la tarde, las despertaron y las llevaron al comedor para alimentarlas, Arturo, tuvo junta de último minuto y no las podrá acompañar.

Después de comer, las dejaron en el corral mientras Martha y Claudia comían, posterior, fueron a verlas y llevaron al baño, al quitarles toda la ropa ambas jóvenes, ya les había empezado a crecer un poco de vello en axilas y zona intima, las limpiaron y rasuraron bien.

Una vez que las dejaron listas, las llevaron a la recamara para ponerles sus ropas para salir, Martha pensó que fueran a poner resistencia pero no hubo nada de eso, de hecho ella misma tuvo que ponerles el sostén, porque pese a estar como bebés estaban algo desarrolladas y tenían que salir a la calle.

La ropa que les escogieron, era de un diseño sencillo que les permitiría cambiarles el pañal.

La ropa que les escogieron, era de un diseño sencillo que les permitiría cambiarles el pañal

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La Apuesta 2: Todo o nada.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora