The destiny of the wolf (Norenmin)

CAPÍTULO 11

"Cenizas de un fuego que jamás llegó a ser apagado"

p.o.v RenJun

Me vestí rápido y salí del lavabo para volver a mi habitación donde me encontré a JaeMin y Jeno jugando con sus manos. Jeno tenía su cabeza sobre el estómago de JaeMin y este le sujetaba las manos jugando con sus dedos, entrelazándolos y repasando cada línea de su mano.

-Arriba, hay cosas que hacer - dije pegándoles a los dos suavemente en el muslo - tenemos que ir a hablar con Yuna - dije yendo a mi mesita de noche y cogiendo el reloj de mi padre. Los dos me miraron y no movieron ni un dedo - me voy a cabrear al final.

-Jeno, muévete, que el bebé va a formar una pataleta como no nos levantamos - dijo JaeMin apartando a Jeno que se quejó un poco. Cuando estuvo en frente de mí dejo un beso suave en mis labios, y yo sonreí por ese gesto cariñoso - Si es que os tengo a los dos en la palma de la mano.

-Mas quisieras tú - dijo Jeno detrás de él subiéndose los pantalones.

-¿Que ha dicho el borde esté? - dijo JaeMin llevándose la mano al pecho haciéndose el ofendido. Corrió hacía Jeno haciendo morritos y cuando estuvo a su altura, Jeno le puso la mano en la cara y dejándolo a un metro de distancia y moviendo las manos de forma exagerada - aparta, pesadilla.

-No me queréis - dijo él soltándose del agarre de Jeno y empezándose a vestir.

-¿No nos tenías en la palma de tu mano? - dije yo echándome un poco de colonia.

-Solo me queréis por mí cuerpazo - dijo él.

-Lo que tú digas - le dije saliendo de la habitación y dejándolo con la palabra en la boca.

Me paré enfrente de la puerta de la habitación de mi hermano. Llevaba tiempo queriendo hablar de lo que dijo Lisa cuando los fuimos a buscar aquel día en el que yo volví mal herido. Pero me atrevía.

Lisa había acusado a mi padre de querer librarse de Taeil. De enviarlo a la guerra contra las brujas y mandar a Lisa a dejar invalido a mi hermano solo para ser yo el que reinara.

Al final me decidí a picar. Porque era lo que debía hacer. Tenía que contárselo. Y saber si él sabía algo de todo ello.

-Pasa - dijo la voz de mi hermano.

Yo asomé la cabeza y le sonreí cuando lo vi acabándose de poner bien el cuello de la camisa. Eso siempre me había encantado de mi hermano. Fuera la situación que fuera, siempre vestía como si fuera a ir a un evento importante.

-Hola Mina - saludé a la prometida de Taeil.

-Buenos días, RenJun - me dijo la chica de pelo castaño sujeto por una larga coleta. Mina llevaba con mi hermano desde tiempos inmemoriales. Y no podía estar más contento de que Taeil hubiera encontrado a alguien como ella, tan leal y buena - bueno yo me voy y os dejo - dijo ella yendo hacia mi hermano y dejando un beso en su mejilla - nos vemos - me dijo pasando por mí lado y dejando una caricia en mi espalda.

-¿Me ayudas? - me dijo Taeil sacando de debajo de la cama la prótesis de la pierna derecha.

-Si claro - dije acercándome y cogiéndola.

Taeil se sentó en el borde de la cama y yo me puse de cuclillas ayudándole a que encargara su muñón. Cuando acabó él se la ajustó a su medida y me sonrió.

-¿Y esa cara de espanto a que viene? - me preguntó tocándome la barbilla para que lo mirará, yo tragué saliva - RenJun, ¿que pasa?

-Yo... - empecé y aparte la mirada de su prótesis intentado buscar las palabras adecuadas - sé quién te hizo esto - le dije tocando su muñón - es Lisa, una de los líderes nuevos, a los que nos enfrentamos - dije yo mirándolo a los ojos, y no puede adivinar que se le estaba pasando por la cabeza en esos momentos - ella dijo que papá...