Compilación One - Shots

Destino

Esta es la segunda parte de "Antes de San Valentín"

Minhyuk despertó en medio de la noche, lo primero que notó fue la evidente humedad en su trasero, lo segundo fue que pese a que estaba seguro su cuerpo estaba caliente, no sentía que le faltaba el aire o un dolor profundo en su abdomen. Lo tercero fueron los brazos alrededor de si así como el aroma que tanto estaba amando para ese instante envolviendolo como si de una manta enorme de frescura se tratara.

Acercó su nariz por instinto al cuello del alfa que aún seguía durmiendo, notó como lubricante salia de su entrada, pensaba que tenía control de si hasta que pudo notar como estaba sobre el alfa rozándose descaradamente.

No se detuvo, no se quería detener, al contrario, acomodó su cuerpo para que estuviera sobre el alfa, su trasero alineado con la erección de Hoseok, algo normal, el cuerpo de un alfa respondía casi de inmediato al celo de un Omega. Casi al mismo tiempo que lograba una posición placentera, sintió como unas manos sostenían sus muslos.

Hoseok había despertado.

Le veía con una sonrisa mientras acariciaba sus muslos, se sentía tan bien sin embargo lejos de moverse para generar fricción, lejos de comenzar a desnudarse o tocar su erección, Minhyuk se agachó para besar a Hoseok. No era un beso pasional, no era frenético o errático, sin ritmo o desesperado, el beso era profundo, calmado, parecía querer conocer a la persona con el y al final terminaron abrazados otra vez mientras sus labios se movían una y otra vez, memorizando formas, sabores, olores, rincones, todo lo que pudieran de la otra cavidad, sin prisa, acumulando calor en cada movimiento de sus labios o su rostro.

Las prendas estorbaron en un punto, sin embargo no fueron rasgadas o quitadas de forma presurosa, no era que no tuvieran prisa, después de todo era un celo, sus intimidades pedían unirse para saciar sus instintos. Besos en cada parte del cuerpo siendo descubierto, lambidas, marcas rojas, algunas mordidas, toques que parecían querer memorizar el cuerpo ajeno pese a la situación y sinceramente nada de eso era necesario, el cuerpo ya estaba preparado desde antes de despertar, pero sentían la necesidad de ello, querían tener la sensación de que la unión era más allá de un instinto carnal inevitable.

Ambos se gozaban cuando el otro gemia o movía por placer ante el descubrimiento de un punto erógeno por ellos, atendían por unos segundos extras esas nuevas zonas, casi siempre dejando una huella que tenían prohibida hacer. No tardaban en cada zona tampoco, el deseo era cada vez más intenso así que sentían la necesidad de apresurarse tan solo para poder conocer un poco al otro, para dar tiempo a memorizar cada detalle. Sus lobos también se sentían distintos, ambos tan deseosos de entregarse al otro, con tanta necesidad de apoderar el cuerpo humano para solo unirse de una vez, pero a la vez controlandose para no hacerlo, porque querían sentir más, querían contemplar más, querían prolongar la cordura, solo para sentirse completos al entregarse a la locura, porque sentían que todo ese proceso estaba llenando espacios entre ellos.

Hoseok no podía detenerse de acercar su boca al cuello ajeno más veces de las que podía considerar normal, si no fuese por el collar, Minhyuk tendría marcas moradas muy prominentes en esa zona, sus manos exploraban con emoción el cuerpo del omega, el no era del todo conciente como su boca pronunciaba palabras como "amor" "hermoso" "mi omega" , una y otra vez como si de una radio rota se tratara.

El omega estaba eufórico, se sentía tan cálido aún con el cuerpo tan necesitado, las palabras del alfa le encantaban, no quería dejar de escucharlas, no quería perder el control y no poder seguir escuchando esa voz tan profunda, lo llevaba al borde de la locura con sus manos, sus besos, su cuello picaba cuando la boca ajena no estaba sobre el, enviaba descargas cuando era atendido tan intensas que Minhyuk solo podía aferrar sus manos a la cabeza ajena.