CAPITULO XXIX

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— ¿Os podéis creer que no me acuerde de cosas de a fuera? - rompe en silencio la gallega

— Si, me lo creo, porque me esta pasando 

— ¿Con que? - pregunta Famous 

— No me acuerdo del olor de la colonia de mis padres, y luego esta los momentos de que estoy hablando con vosotros de un amigo y se me va el nombre, pero es que la cosa es que lo se pero no puedo decirlo - digo haciendo gestos raros con las manos - es raro

— Pues yo no me acuerdo de como se llama el pueblo donde vive mi amigo Ander - dice Miki

— Estar aquí encerrados nos esta afectando - puntualiza Marilia

— ¿Nos podéis sacar a la calle algún dia? - dice Marta hacia la cámara 

— Si, por favor, necesito aire fresco 

— Ella callejera - dice Miki riendo 

— No lo sabes tu bien - digo riendo - desde pequeña con mis padres salimos por la mañana y por la noche a correr, para despejar la mente 

— Por eso la cabrona no esta muerta en las clases de Gotzon ni en las de Magali - suelta asombrada Mari señalándome 

— Eso pasa cuando uno de tus padres es poli - digo levantándome para dejar el plato en el fregadero 

— La infancia que ha tenido que pasar con eso - dice Marilia con las manos en la cabeza 

— No te creas, fue interesante 

No escuche más sus delirios ya que me fui a la sala de los Javis no sin antes recoger mi violín. Ese violín que no toco desde la gala 2, ó como a mi me gusta llamarla la gala mágica. Esa gala se me va a quedar grabada para toda la vida, y creo que a Miki le pasa lo mismo, sobre todo con la gran actuación incluyendo el momento mágico que vivimos. 

Entonces empecé a tocar sin importarme nada queriendo quitarme todo el estrés que me estaba causando la canción de esta semana, cerrando los ojos quede atrapada en la melodía que producían mis dedos.



Narra Miki: 

Estaba yendo hacia los box siguiendo el sonido de un  violín pero la fuente de esa melodía estaba en la clase de los Javis, donde descubrí que era Laia tocando ese precioso violín que le trajeron sus padres. 

La veia disfrutar de la cancion como si el mundo a su alrededor no existiera mientras esa musica sonaba, me alegraba verla disfrutar quitandose la presion que tenemos en los hombros aunque sea por unos minutos.

Nada más terminar de tocar seguía con sus preciosos ojos cerrados, pero al momento que empecé a aplaudir ella abrió sus ojos asustada.

— Te acabo de romper la burbuja, lo siento - digo apenado

— No pasa nada, ha sido culpa mía, me he quedado embelesada con la música 

— ¿Por qué no has tocado antes? - pregunto mientras tomaba asiento en un sillón de la esquina

— No he encontrado el momento, estamos todo el dia ocupados Mike

— ¿Crees que no lo se? - pregunte levantando las cejas - por eso te veo muy poco, tenemos clases en todo momento - digo con una mueca 

— Ojala volver a esa semana, la semana 2 ¿no?

— Si - digo en un suspiro - me encanta trabajar con mi reina - digo abrazándola por la cintura

— Ooh, ¿Qué te pasa hoy il mio re? Estas muy mimoso

— Solo quiero estar contigo aunque sea una tarde, la tarde de nuestro dia libre, por favor - digo con cara de cachorrito

— Sabes que solo me lo tenias que decir, ¿no? - dice con la mirada enternecida

— ¿Entonces? - pregunto como niño pequeño 

— Si - dice riendo


[...]


La tarde paso entre risa, disfrutando la compañía el uno del otro, solo ella y yo. Aunque como estamos en un sitio encerrados y con cámaras, no estamos completamente solos, sino que tenemos muchos ojos encima nuestra, si a eso sumamos los compañeros cotillas que tenemos, pues....

Ahora nos encontrábamos haciendo preguntas al azar.

— ¿Tu lugar favorito? 

— Ibiza, fui una vez pero me encanto - responde después de un pequeño tiempo - mi turno, ¿plato favorito? 

— Los canelones de mi madre - respondo sin pensar - muchas veces le pido la receta pero nunca me la da - digo una mueca - ¿Libro favorito?

— La saga de Harry Potter, obvio 

— ¿Cuál de todos? Tienes que elegir uno

— Si tuviera que elegir uno seria............. Harry Potter y el prisionero de Azkaban. Ese libro es mi favorito 

— Chicos a cenar - nos llama Famous por el pasillo 

— Ahora vamos - dice ella un poco alto - vamos, que nos quedamos sin comida

Cenamos todos tranquilos con nuestras conversaciones típicas, hasta que encontramos Famous y yo un rollo de celo. Sin planearlo Famous sujeto a Laia y yo empecé a dar vueltas al celo asi pegándola a la silla. 

— Los ecologistas gastando celo - dice Sabela, que recibió una mirada cansada por mi parte 

— ¿Por que a mi? - dice Lai en un lloriqueo falso

— No tenemos ni idea, no lo hemos planeado - responde mi compinche 

— Lo mejor ha sido como lo han hecho - dice Mari riéndose 

— ¿Sabéis lo que mola? - pregunta Marta quitándome el celo - ponerse el celo en la cara 

Ahí sufrí un ataque de parte algunos compañeros, que dieron vueltas al celo en mi cara y seguro quedando deforme por las risas de los demás, pero la que más me importaba era la de mi chica. 

Mi chica. 

Hacia mucho que no le decía a alguien asi, y era la primera vez que me quedaba pensando que Laia era mi chica, y la suerte que tenia de tenerla, era enorme. 

Acabamos de gastar todo el rollo, ya que no solo fuimos victimas Laia y yo, no, también se unieron, Marta, Famous y Marilia. Estuvimos de risa todo ese rato, pero la verdadera risa, llego cuando nos toco quitárnoslo, ya que el celo estaba pegado en cejas y en caso de Famous y yo, en barba también. 

— Me acabo de hacer una depilación gratuita - digo al ver algunos pelillos en el celo 

— Pues vaya depilación - dice riendo Lai al ver lo mismo que yo

— ¿Te estas riendo de mi? ¿De mi? - pregunto indignado 

— No - dice alargando la "o" - bueno, puede que si

— Ahora veras, ven aquí 

Y empezamos una persecución, ella huyendo de mi y yo persiguiéndola, ¿el fin? hacerle cosquillas, de esas que odia tanto y que yo disfruto haciéndoselas. 

La atrape en el sofá y ahí empezó el ataque de cosquillas.

— Para, Miki, para - dice ella como puede - para, para, por favor - dice retorciéndose

— ¿Qué me das a cambios si paro? - digo bajando la intensidad de las cosquillas

— ¿Mi amor? - pregunta inocente, para asi yo volver a aumenta la intensidad - vale, ya, muchos besos de mi parte

— Acepto el trato 

— Ven aquí - dice para fundirnos en un beso - eren un chantajista ¿lo sabias?

— Nunca me lo han dicho - digo con una sonrisa de oreja a oreja 



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