¿Verdad o beso?『 LiSoo ♡ JenSoo 』

🌸 E s p e c i a l 3 (2/2) JS 🌸

 Unos meses después

Jennie se dirigía hacia la cafetería en busca de Jisoo para desayunar juntas, con el tiempo se volvió un ámbito en la vida de ambas. La amistad que habían formado iba creciendo cada vez más.

Cuando al fin pudo encontrarla fue caminando rápido hacia ella hasta que vio que no estaba sola.

—¡Jennie! —Dijo una animada Jisoo.

—Hola Jisoo, ¿estás ocupada? —La más grande pudo notar el tono de voz de Jennie.

—¿Eh? No, ¿estás bien? —No sabía el motivo del mal humor de su amiga.

—Si, —Hizo una pausa— me acabo de acordar que tengo algo que hacer, nos vemos después.

—¿No vas a desayunar? Nayeon vendrá con nosotras— La nombrada miró a Jennie a los ojos haciendo contacto visual por unos segundos hasta que la más bajita desvió su mirada hacia Jisoo.

—Me encantaría pero si no completo la tarea de inglés estaré en problemas, desayunen ustedes —Con eso se despidió dejando a una Jisoo confundida.

—No debí haber aceptado tu invitación —Se sentía triste por Nayeon, no sabía porque Jennie había actuado de esa manera.

—Se siente así porque le fue mal en una materia, no te sientas mal —Cuando terminen las clases hablaría con ella.

Nayeon asintió lentamente forzando una sonrisa.

Al finalizar la última clase, Jisoo se fue directamente al aula de su amiga y esperaría que termine, hacían eso sí no había mucha diferencia en sus horarios.

Tocó el timbre del receso y empezaron a salir todos, Jennie fue la última junto con otra chica.

—¡Hola! Tenía muchas ganas de conocerte, Jennie me estuvo hablando mucho de ti —La chica le estrechaba la mano animada—. Soy Hirai Momo.

—El placer es todo mío —Sonreía feliz de saber que Jennie conoció a alguien más.

—Entonces después hablamos, ¿te parece si te llamo tipo 7? —El humor de Jennie era totalmente diferente al de la mañana.

—Esperare tu llamada, nos vemos.

Momo se fue primero.

—Asi que...

—Perdón, sé que esta mañana no me comporté amigable.

—No tienes que disculparte, si tienes algún problema sabes que podés contar conmigo.

Jennie asintió, sabía que podría confiar en su única amiga y que la escucharía.

Las dos se dirigieron hacia la parada del autobús, la primera vez que se fueron juntas se sorprendieron que vivían en el mismo barrio, era como si el destino lo tuviera todo planeado.