Voyageur

Confianza

Jerico aguardo en silencio observando la pared blanca. Por la ventana la lluvia golpeaba las hojas de los arboles. Por lo general nunca llovía allí, relaciono esa singularidad con la situación de esa hermosa mujer. Elevo la mirada al techo de la sala donde se veía la sombra de las hojas, estaba confundido y la ansiedad por saber de ella lo mantenía violento. Necesitaba estar con ella o pelear con algún macho, prefería la primera pero sabia en el fondo que seria un problema para la recuperación de la humana.

Escucho el eco de unos tacones e inhalo el aire contenido en su pecho al tiempo que frotaba sus manos, era momento de hablar con Trisha. De exigir explicaciones y de sosacar información. Giro sobre sus talones y se topo a unos pasos de distancia con la doctora. Vio como su boca se torcía y como bajaba la mirada, eso lo hizo sentir triste. Su indiferencia hacia ella había provocado eso y las miradas de odio de las especies solo incrementaban la incomodidad.

-Trisha, necesito saber - titubeo y dio una respiración profunda - Tengo muchas preguntas sobre ella, yo... creo que es obvia mi atracción - la mano en alto de la doctora lo hizo parar de hablar.

Aclarando su garganta y colocando sus manos en los bolsillo de la bata miro fijamente a la especie - Jerico, ella no esta en un momento para conocer a NINGÚN macho, tampoco para entender su comportamiento ¡Te pido que evites lo posible acercarte a ella! - el nombrado retrocedió sorprendido por la casi amenaza de la pequeña humana y sin intención sus orificios nasales se expandieron para soltar un gruñido bajo - ¡No te equivoques! No es por ti es por ella. No es una humana común. Te diré para tu tranquilidad que sus ojos reaccionan a estímulos y eso es muy alentador - dijo con una sonrisa sincera.

- Jerico, ella pasara por momentos difíciles, para tu tranquilidad pediré que sea atendida por hembras pero tu - lo señalo con un dedo y frunció el ceño - debes mantenerte alejado hasta que ella se haya recuperado, no quiero nada cercano a mi mujer y golpes en el pecho - termino con la voz gruesa fingiendo ser un macho enojado. 

- ¡No! Si dices que pasara por momentos difíciles es mejor que este acompañada ¡Y... Y yo puedo ser su acompañante! - el tono confiado de la especie hizo enternecer a la medica pero era una decisión tomada - Puedo ayudarla a rehabilitarse, a que otros machos no se acerquen... Puedo

- Estas hasta la nuca por ella, lo entiendo y puedo reconocerlo. Soy la compañera de una especie, viví en carne propia como se comportan cuando están así - señalo de arriba abajo al hombre - de ¡emocionados! por una mujer - se acerco y tomo la mano de la especie - piénsalo... 

La especie sintió el roce de la bata blanca y giro para reñir por la resolución ya tomada por Trisha pero se encontró solo con un carrito de limpieza, el cual no dudo en patear ¡Estaba enojado! ¡furioso! ¡Su mujer iba a estar lejos de él! Aunque la atendieran las hembras el maldito de Destiny se acercaría y el ¡El lejos!. 

"¡Nadie lo iba a alejar de su mujer! Menos una pequeña humana rubia"  y con ese pensamiento camino haciendo retumbar sus firmes pasos en el estrecho pasillo en busca de su hembra por que si Jerico había encontrado a su compañera.