Incendio

Capitulo 6

Me desperté sintiéndome muy mareada, el ajetreo del día anterior y mis pensamientos parece que me están pasando la cuenta. Aunque a decir verdad, no puedo hacer nada al respecto, tengo que levantarme y seguir con las labores. Comencé a dirigirme a los calabozos para llevar a los recién transformados a entrenar por primera vez desde que se convirtieron, para ellos será más complicado el proceso de evaluación ya que contamos con poco tiempo para entrenarlos. Al llegar me dispuse a desencadenarlos a cada uno y darles ropa, ya que la suya se encontraba toda destrozada. Al comienzo se les iba a dificultar el caminar, también los nuevos sonidos que nuestro oído más desarrollado tenía la capacidad de escuchar al transformarnos les iba a molestar, pero con el tiempo se acostumbraran.

- Muy bien, esto es lo que haremos. Los guiare a la sala de entrenamiento para que aprendan el combate básico y el manejo de armas, luego en unas semanas les daremos su calificación, les recomiendo que den lo mejor de sí ya que ustedes tienen menos tiempo para entrenar, así que esfuércense al máximo.

Ellos me miraban con expectación y atentos a lo que les decía, saben que hablo en serio y de que de acuerdo lo que rindieran se decidiría si vivirían. El camino hasta la sala de entrenamiento fue silencioso y corto, ya que desde los calabozos a la base son aproximadamente diez minutos caminando, no parece mucho pero si sabes por donde ir te ahorras tiempo. Al llegar a la sala vi a Gael por lo que le hice un ademan para que se acercara.

- Estos son lo que se transformaron hace poco, desígnalos como tú quieras, pero dales prioridad ya que falta poco tiempo para el ataque.

-Muy bien. ¡Hey ustedes!, dijo dirigiéndose a los chicos atrás de mi.- Síganme. Dijo para luego darse la vuelta y caminar hacia la Hoguera. Luego de eso me dispuse a dirigirme a la entrada, ya que debo darle un recorrido al tal Gabriel. La verdad no me da muy buena espina, pero debo obedecer órdenes. Antes de entrar a las instalaciones sentí que me llamaban, por lo que me di la vuelta para ver quién era.

- Hola Líder, quería saber si podemos entrenar un poco. Me dijo Aluk, al parecer se encontraba algo emocionado por entrenar.

- No tienes por qué decirme Líder si no está Gregor, puedes decirme Endia, pero en estos momento no puedo ya que debo guiar a un líder por las instalaciones. Le dije algo apresurada ya que quería terminar ese recorrido lo antes posible. 

- ¿Podría ir contigo?, juro que no molestare, así aprendo más sobre las instalaciones.-La verdad me sorprendió que quisiera aprender más sobre las instalaciones, pero al ser yo su entrenadora era mi deber que aprendiera para que fuera un buen soldado, además me gustaba su motivación por aprender.

- Esta bien, pero al estar en presencia de este líder no hables, ya que si dices algo de mal gusto por él no sé lo que podría hacerte, así que solo no digas nada, ¿quedo claro?

- Si.-Dijo seriamente.

Le hice un ademan para que me siguiera y poder ir a la entrada donde nos estaba esperando Gregor junto a Sam y el misterioso Gabriel con su segundo Osman.

–Perdón por llegar tarde, tuve que hacer un pendiente con los transformados. Les dije a todos a modo de disculpa.

- No te preocupes Endia, de hecho acabamos de llegar. Dijo Gabriel con una sonrisa en su rostro para luego ver a Aluk a mis espaldas.- ¿Quién es el?, dijo escrutándolo con la mirada.

-Es un guerrero que entreno, no se preocupe por él. Le respondí calmadamente. Luego de decir esto no dijo nada más y se dispuso a seguirnos a mí y a Sam para iniciar el recorrido. Primero fuimos las torres de vigilancia y luego a los calabozos

.-Porque hay un olor de sangre tan fuerte en este lugar. Dijo Osman con una mueca en su rostro. Era la primera vez que escuchaba su voz, era muy grave y de cierta manera intimidaba.

-Es debido a los nuevos transformados, dos no pudieron sobrevivir pero el olor de su sangre sigue en el aire.- Luego de eso no dijo nada más por lo que nos dirigimos a la sala de entrenamiento que estaba cerca de la hoguera. Mientras los demás observaban a los que estaban entrenando en ese momento yo me aleje un poco y me quede viendo a los que habían llegado el año pasado lanzar cuchillos. De cierta manera los que llegaron hace poco me preocupaban, ya que de seguro morirían por no tener el enteramiento necesario para la batalla, casi diez días no eran suficientes para ser un buen guerrero, se necesitaban por los menos un par de meses para vivir lo suficiente, pero es obvio que Gregor sabe eso y estos últimos chicos que trajo son solo de distracción para que los guerreros más experimentados puedan penetran en la ciudad. En otras palabras eran la carnada, era obvio que algo así sucedería ya que no tendrán posibilidades, pero de todas formas siento algo de resentimiento por ellos, por eso le dije a Dorian que les dé prioridad, al menos algo que puedan aprender para tener alguna posibilidad de sobrevivir.

-Veo que estas un poco pálida, ¿acaso te sientes bien? Me dijo Aluk.

- Estoy bien le dije con una pequeña sonrisa, pero luego me distraigo viendo a Gabriel acercarse a nosotros.

-Veo que las instalaciones son esplendidas y los guerreros están bien entrenados, pero me ha llamado la atención que hay un grupo que se ve descolocado. Dijo posando su mirada en los novatos.

-Si, ellos son los que llegaron como hace tres días, y algunos de ellos se transformaron hace unos días y todavía les cuesta trabajo controlarse. Dije observándolo.

- Y dime Endia, ¿qué tan segura estas de tus habilidades?- me dijo con mirada retadora.

- No le entiendo-le dije confundida.

- Lo que digo Endia es que me gustaría ver que tan hábil eres en el combate.- Me dijo con una sonrisa coqueta.

Lo mire detenidamente y el levanto una ceja interrogante, yo sonreí con seguridad.- Estoy dispuesta a demostrarlo-le dije con total confianza.

-Muy bien- se dio media vuelta para luego mirarme.- A la hoguera