🌙 || C E L O S - luzuplay. #KARMALAND4 [Terminada]

9 - Culpable

Despierto solo porque las fuertes ráfagas de viento no dejan de azotar nuestra tienda de campaña. La cantidad de agua que cae es bestial, los truenos parecen resonar por todo el bosque. Lolito sigue durmiendo a mis espaldas, roncando. No importa que tan pesado tenga el sueño, siento que cualquiera sería capaz de alterarse en esta situación.

Abro el cierre para poder ver fuera, y veo al río aumentar el cauce. Comienzo a sacudir a Lolito, es momento de irnos, pues en este lugar no podremos jamás encontrar refugio. No he traído mis herramientas para improvisar una pequeña cabaña, y dudo que él las tenga ya que su equipaje ha sido mínimo.

-Ehj... ¿Qué sucede? -Su voz es ronca y sus ojos están rojos. De repente ambos nos sobresaltamos ya que oímos el crujido de una rama, la cual pronto caerá. - ¿¡Qué ha sido eso!?

- ¡Hay que irnos! -Le grito. Lolito se levanta rápidamente y comienza a meter nuestras cosas en los bolsos. Yo me apresuro a doblar nuestras bolsas para dormir.

Una vez que las cosas dentro ya están listas, ambos nos ponemos a la espalda nuestras mochilas y bolsas, y vamos fuera para poder desarmar la tienda. El viento hace que el pelo de Lolito vuele libre por el aire y se le meta en los ojos y la boca. Desclavamos las estacas que mantienen fija la tienda a la tierra mientras el no deja de decir "¡Joder!". En un momento, deja de agarrar la carpa* para poder atárselo, lo que provoca que esta salga volando por los aires ya que yo tampoco la tenía agarrada.

- ¡Eh! -Exclama, comienza a correr detrás de ella, pero el viento es más poderoso y se aleja tanto que apenas podemos verla entre los árboles. No puedo enfurecerme, no cuando veo en ese mismo tiempo como cae la rama frente a nosotros que antes habíamos oído crujir. - ¡Auron, vamos!

Me toma de la mano y corremos entre árboles, agua y barro. Estoy empapado y seguro de que mi teléfono ya no sirve. ¿Qué podría ser peor? Parece ser el Karma castigándome por ser el peor novio de este puto pueblo. Lolito sigue aferrado a mi mano y resulta incómodo, ya que han pasado dos días desde que nos besamos y ninguno se ha vuelto a hablar, tocar o mirar. Y ahora estámos corriendo bajo un maldito aguacero por un bosque que me resulta infinito. ¿Quién nos manda a no revisar el pronóstico? ¿Y a adentrarnos como 40 kilómetros dentro de un bosque donde, teóricamente, está prohibido entrar? Ya me da igual, porque cuando llegue probablemente ni siquiera Luzu estará esperándome. ¿Al menos se sentirá preocupado? Nunca le avisé que estaría aquí.

Llevamos escapando de la lluvia por 15 minutos, mis piernas deciden que no pueden seguir y me caigo de rodillas al barro. Aún sigo agarrándome fuertemente a la mano de Lolito, lo que hace que caiga a mi lado y salpique barro a mi rostro.

De repente ya no lo soporto. Estoy lleno de barro y el viento fuerte me enmaraña el pelo. ¿Por qué hice eso? Las lágrimas me resbalan por el rostro y no puedo secármelas porque se me meterá barro también en los ojos. No escucho mis propios sollozos porque el ruido del agua golpeando sobre las hojas es mayor. ¿Cómo puedo arreglar algo que hice tan mal que ahora no tiene solución? Sé que debo estar hecho un desastre. Hubiera querido que aquella rama me reventara la cabeza.

Siento que los brazos de Lolito me envuelven. No es suficiente, pero siento que me tranquiliza.

- ¿Por qué me siento tan bien cuando estoy contigo? -Sé que no puede escucharme, pero necesitaba decirlo. Cuando lo dices, se convierte en un hecho y no puedes escapar de el. Lloro en su pecho y sus brazos me reconfortan. Estamos empapados y sé que me resfriaré, y ya no habrá nadie para cuidarme porque tengo que decirte lo que hice. Tengo que hablar contigo, Luzu, con la esperanza de que me perdones.

Sé que no es muy tarde para mí, porque incluso con esta lluvia, puedo ver el sol.

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Cuando llegamos a Karmaland la lluvia ha bajado su intensidad. Vamos directo al pueblo y una vez que llegamos al medio, intentamos despedirnos.