Anthy

10K 707 99
                                    

Reencarne en este mundo si siquiera quererlo, ahora solo soy una niña de 3 años y no soporto la idea de crecer sabiendo mi futuro.

Lily me enseña todo sobre el reino y de claude, pero quiero escapar y sé que puedo pero ¿Cómo?
Camino hacia el jardín, está todo maltratado y las flores se marchitan, sigo caminando y veo un hombre de pelo negro largo y ropas estratagema durmiendo en un árbol.

Me acerco a él y le veo más de cerca, en cierto aspecto es guapo pero sería imposible, dejo de mirarle y me pongo a caminar de vuelta al palacio, pero algo me lo impide.

Me doy la vuelta y veo al señor agarrándome la mano, del susto grito aunque él me calla rápidamente.

-¿Quién eres tú? -Me pregunte.

No tuve respuesta del mago.

- Soy un gran mago pequeña. - ¡Mago!, entonces existe la magia.

- Señor mago yo puedo hacer magia -Si hay magia significa que podría escapar con éxito, podría teletransportarme.

El mago se acercó a mi. - ¿Por qué quieres escapar?

- Mi padre no me quiere, quiero escapar de sus manos.

Me siguió mirando a los ojos. - De acuerdo, ¿Que te parece venir conmigo? - ¿Debería decir que sí? puede que sea un asesino, o haga algo malo conmigo, pero no puedo seguir en el palacio, deberé tomar el riesgo, por lo que solo asentí. - Pero no puedo permanecer con este aspecto toda la vida. - Se volvió un mago de mi misma edad, la magia es increíble. - Volveré por ti cuando dentro de tres días.

Desapareció de golpe, corrí hacia la mansión y intente agarrar todas las joyas posibles, necesitaba dinero si no obviamente sería imposible sobrevivir.

Pasaron tres días y él apareció en mi habitación, fui a su lado con mis sacos de joyas.

- No lo lleves, no necesitaremos ese dinero.

- Pero, ¿Cómo pensaremos sobrevivir?

- Tranquila tengo un plan.

Llegamos a una iglesia, el mago iba a tocar la puerta pero se lo impedí. - Señor mago mis ojos delataran que soy una princesa. 

- Tranquila, les cambie el color de los ojos y no me llames señor mago, mi nombre es Lucas. - Toco la puerta y nos abrió una monja. - Señora, yo soy un pobre niño huérfano, y ella es una buena amiga mía. ¿Podríamos estar acogidos en su iglesia?

Increíblemente fuimos aceptados en la iglesia, donde nos aceptaron.

Nos llevaron en una habitación donde había más niños, me dejaron una cama y me quede ahí.

Una chica se acerco a mi, y me miro fijamente. - Tus ojos son hermoso, tienes un color rosa muy bonitos. - ¿Rosa? ese es el color que me puso. - Mi nombre es Daniela, mucho gusto.

- Yo me llamo Athy y él es Lucas.

Supongo que aquí estaré bien, sere criada como una niña cualquiera.




Pequeña bailarina - Princesa encantadora [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora