T2-Capítulo 8. Confesión

1K 150 80
                                    


ADVERTENCIA.

Este capítulo contiene escenas no aptas para todo público tales como descripciones gráficas, actos sexuales, homicidio, presencia de hematofilia.

Les recomiendo saltarse la parte lemon si son muy sensibles, pondré una marca (✘) cuando esa parte vaya a comenzar y otra marca igual cuando finalice para que sepan donde leer en caso de que quieran saltarlo porque sí es muy asqueroso.

Perdón de antemano.

Y solo para aclarar, por ningún motivo estoy buscando normalizar y/o romantizar prácticas de ese tipo, todo lo que he escrito es simple ficción. Igual, al último explicaré por qué escribí eso.


¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Seokjin seguía algo confundido por el cambio tan drástico en el estado de humor de Taehyung. No era que no le agradara, solo era un tanto extraño.

Caminó detrás de Taehyung, buscando a Yechan, quien al parecer se había esfumado pues no podían encontrarlo en ningún lado.


—Taehyung. —Lo llamó Jin mientras caminaban en la cocina.

—¿Sí? —preguntó sin dejar de observar a todos lados en busca de una señal que le indicase donde estaba Yechan.

—¿Por qué tenías que dejarlo ir? —cuestionó, todavía algo molesto—. Vamos a matarlo de todas formas, ¿por qué hacer eso? ¿para qué tanta actuación?

—Quería darte una sorpresa —respondió—. Es algo aburrido solo matarlos, ¿no crees? —Volteó a mirar a Jin y ladeó su cabeza de una forma que a Seokjin le pareció tierna, demasiado, considerando el tema del que hablaban—. Si hacemos esto, es como si les diéramos una esperanza, pero ambos sabemos que no es así, solo dejamos que corran y se escondan como unos imbéciles, pero su destino sigue siendo el mismo.

—Parecías muy decidido a no querer matarlo —dijo de una manera sugerente. Jin no terminaba de creer lo que Taehyung decía, aquello no podía ser una "sorpresa" como había dicho, Taehyung estaba mintiendo, de eso estaba seguro.

—Solo fingía para más emoción —respondió con simpleza—. ¿Qué? ¿No crees en mí?

—Es solo que estoy confundido.

—¡Ahí está! —exclamó Taehyung, señalando a Yechan quien permanecía escondido hacía solo unos segundos.


Yechan corrió y los otros dos chicos también corrieron hasta entrar de nuevo en la habitación de Yechan, donde finalmente lo acorralaron, cerrando la puerta tras de sí.

Werewolf Game || JinTaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora