—Hija, ¿como te encuentras? —dice mamá corriendo hasta mí con papá y los Potter detrás
—Bien, pero me mareo —digo y Ginny me pasa a Joria y vuelvo a tener fuerza de golpe
—Esta niña tiene más poderes que solo los gritos, hace nada Victoria no podía ni sentadarse —dice James sentándose a mi lado y los dos miramos a Joria, la cual reía y nos miraba con los ojos muy abiertos
—Hijo... Arriba no hay nadie —los dos nos miramos y abrazo fuerte a Joria
—Papá, te juro que estaban —dice James levantándose
—Mm... Mm... —se queja Joria y todos se tapan los oídos mientras yo me río
—¿Y cuanto decis que dura esto? —pregunta James
—Como hasta el año y medio más o menos —dice mi madre y James suspira
—Tenemos otra cosa que contar —salta James de golpe ya que se había formado un silencio
—¿Qué pasa hijo? —pregunta Ginny
—Nos vamos a casar —decimos a la vez y todos sonríen, si todos, hasta mí padre que se levanta y es el primero en felicitarnos
