Aviso +18
James me lleva hasta la sala de los menesteres, hemos estado alguna vez. Entramos y nos tumbamos en un sofá que hay.
Nos empezamos a besar, James me sienta encima suyo y seguimos con el beso.
James me agarra de las piernas y nos levantamos, bueno se levanta conmigo encima. Camina hasta una cama que ha aparecido, claro, me lo he imaginado yo, que tan santa no soy pero no se lo digais a Scorpius y mucho menos a mis padres...
James me tumba y se separa.
—Tu... ¿Quieres? —pregunta mirándome con un brillo en los ojos
— James amor, yo me he imaginado la cama, ¿tú qué crees? —el se ríe y me besa de nuevo
Va bajando los besos por el cuello y está metiendo las manos por debajo de la camisa, hasta que la quita por completo, yo hago lo mismo con la suya y él sigue bajando los besos que poco a poco se van haciendo chupetones.
Me quita también la falda y sus pantalones ambos quedamos en ropa interior hasta que esta es retirada.
—Si no quieres dímelo, no pasa nada, puedo esperar Vic... —yo le sonrío, ¿como puede ser tan tierno?
— James quiero que sea contigo, quiero que seas tú, siempre tú —el sonríe y me besa de nuevo mientras va entrando, ¿me duele? Si, pero si es con él, es pefecto... Lo amo
Poco a poco va subiendo la intensidad y en la habitación solo se pueden escuchar jadeos y gemidos.
—Victoria, te amo —dice medio gritando
—Te amo James —grito yo
