KOYANG {3•PARTE} FIRE

{18} YO SI TE QUIERO

Taehyung: Déjame llevarte conmigo a palacio. Puedo darte toda la comida que quieras, vestidos de millas de colores como las niñas que me dijiste, podrás jugar con la clase de juguetes que apetezcan y podrás aprender sobre magia en Koyang. Solo déjame llevarte conmigo.

Haneul: ¿Por qué harías algo así?

Taehyung: Porque quiero y porque puedo.

Haneul: Mamá me dijo que nadie querría a alguien como yo por eso mato a papá y me dejo aquí, ni siquiera sé si puedo hacer magia. ¿Por qué querrías llevarme tú entonces?

Taehyung: Porque a diferencia de tu madre, yo si quiero darte lo que te mereces, yo si te quiero.

Sus lágrimas son como pequeñas dagas en mi corazón y sin poder aguantar más las ganas la abrazo arrullándola, tratando de calmarla.

Cuando consigo mi cometido mira a Jennie y Jimin quienes también la sonríen dulcemente, y ante todo pronóstico, escapa de mis brazos para abrazarlos a ellos también.

Taehyung: ¿Es eso un sí?

Asiente feliz, por lo que nos incorporamos y montamos en los caballos. Monto a la pequeña en Antares, justo delante mío para que no pueda caerse. La veo segura encima del caballo, mientras acaricia su pelaje.

Taehyung: ¿Habías montado en caballo antes?

Haneul: No, es mi primera vez.

Taehyung: Agárrate bien entonces.

[...]

Las grandes puertas de palacio se abren dejándonos pasar al interior y hay escaleras desde la parte de la vivienda dentro de este. Los soldados se han quedado fuera mientras nosotros nos descalzamos y llegamos a la sala común.

Nayeon: ¡Tae! Qué bien que hayáis llegado, la reina no deja de preguntar por ti.

Taehyung: ¿Ha ocurrido algo?

Nayeon: No, pero ya sabes cómo se pone cuando se siente sola.

Y hablando del rey de roma, ahí llega la reina con dos sirvientas, hablándole al sastre.

Jihyo: ¡Por fin llegas! Necesito tus medidas para el traje de novio. Oh, ¿Pero ¿quién es esta niña?

Haneul esconde tras mis piernas, captando que no pertenece a este lugar por sus pintas y forma de ser. Mientras palacio es todo ordenado, pulcro y con lujos, ella viste con unos harapos, el pelo enmarañado y su piel oscura de la tierra.

Taehyung: Haneul, saluda.

Se inclinó sin dejar de esconderse detrás de mí, a con temor ante la mirada poderosa de la reina. Y es que hasta yo tuve que pasar por aquello.

Jihyo: Pero bueno, Taehyungie cómo no me has dicho que se trata de mi nieta. Doncellas, prepare la habitación al lado de la de mi hijo con nuevas sábanas y un baño caliente. Traed los vestidos de niña y bajad los juguetes del arcón.