Alma

tu eres mi melodía.

Todo estaba listo.

Me dispuse a llamrle.

Estaba nerviosa.

Pero cuando escuche su hola tras el telefono.

Mi voz tan temblorosa le respondió.

Le pedi que nos encontráramos en el parque abandonado de la ciudad.

Ahi nadie nos vería.

Podía correr cuando quisiera.

Sin que nadie me detuviera.

Tome algo muy sutil para vestir.

Y dejé mi cabello caer.

Ya no habia vuelta atrás.

Estaba en camino cuando pensé, si él realmente iría.

Pero cuando observé.

Ahi estaba.

Me miraba.

Me sonreía como siempre.

Y yo solo podia agachar mi cabeza y mirar al suelo.

Me dio un fuerte abrazo.

Que para mí seria el ultimo.

O el comienzo de miles más.

Estaba enloqueciendo.

Necesitaba decírselo.

Las hojas de los árboles caían.

El viento soplaba fuertemente.

Y la tarde se estaba poniendo triste.

De mis labios salio: es que, es que, es algo complicado.

El sólo me miró sin decir ni una sola palabra.

Y se lo dije.

El me dio un fuerte abrazo.

Pense que talvez era de consolación.

Y fue así.

Me solte de él fuertemente.

Y corrí, corrí, corrí.

Cuando lo perdí de vista.

Me quede sin aliento de lo cansada que estaba.

Y la lluvia me acompañó hacia mi casa.

Caminaba desecha y mas rota aún.

Estaba apunto de cruzar la esquina.

Cuando derrepente, solo puedo ver una luz.

Y lo olvide todo.