Isa & Joanne

Capitulo IV

"Sentimientos"

-Jamás vas a poder lograr tus sueños Isa… deberías dejar de soñar, lo que debes hacer es ayudarme
-Pero mi sueño… quiero ser modelo…
-No y punto, no tienes la actitud

Ese día me habia encerrado en mi habitación todo el día, no quería hablar con nadie, menos comer, las palabras de mi padre se reproducían una y otra vez por mi mente, él no creía en potencial, sin embargo logró lo que quería, renunciar a mis sueños…

Borré todas mis fotografías, cancele muchas solicitudes, me pase llorando a medida veía como eliminaba mi sueño, habia dejado de confiar en mi, de creer y  doblegarme ante mis padres…

Al día siguiente salí de mi escondite, me duché y vestí de una manera elegante, tomé un ligero desayuno, revisé mi móvil, tenia muchos mensajes de algunos conocidos preguntándome que me habia sucedido, sabían de mi sueño, lo que hice los dejo desconcertados, no era momento de responderles, no estaba lista… menos debia darle explicaciones a la gente de lo que hago.

Llegué a la empresa de mi padre, todos estaban sorprendidos de verme, no me esperaban… siempre decia que no quería hacerme cargo del patrimonio de mis padres, no era un secreto para las personas que sabían de mi existencia, aún recuerdo los tres meses que estuve en capacitación, reuniones y toda la preparación necesaria para hacerme cargo, centre mi dolor en el trabajo, en enorgullecer a mi familia.

No me habia dado cuenta que mientras estuve ida en el recuerdo, estaba llorando, Joanne me estaba sujetando la mano con preocupación.

-Jamás habia visto tanto dolor en la mirada de una persona -comentó ella dándome un abrazo- Todo va estar bien, estoy contigo.

No sabia que decir… o como reaccionar, sencillamente me limite a corresponderle el abrazo y darle las gracias por su apoyo.

-Estaré bien, ahora hay preparar las boquitas, ¿te ayudo? -preguntaba ansiosa a que me respondiera que sí-.
-Claro, ven

La seguí hasta la cocina, no podía creerlo, era súper preciosa, muy ordenada, sin pedir permiso abrí su nevera, tengo la mala costumbre de andar husmeando en las neveras ajenas, ya que me da curiosidad, se que es muy raro, pero así soy.

-Tranquila, se me hace muy tierno -me dijo sonriendo-.
-¿Lo crees?
-Sí de hecho, desde que la vi por primera vez, aunque se mostraba seria, noté su ternura
-Eres la primera persona que me lo dice -respondí sonrojada-.
-Me siento especial
-Estoy segura que lo eres

Me puse a preparar unos nachos en unos bowls, mientras ella le agregaba queso cheddar derretido, se puso a tararear una canción que se me hacia familiar, pero no recordaba el nombre, sin embargo disfrutaba escucharla, me daba mucha paz.

-¿Qué le gustaria beber señorita? -me preguntó amablemente-.
-Un refresco estaría bien, gracias, por cierto no es necesario que me hables tan formalmente, recuerda
-Lo sé, pero aún me cuesta llamarla por su nombre

Nos fuimos a la sala de nuevo junto con los nachos y refrescos, nos sentamos juntas y sin darme cuenta ella habia tomado mi mano.

-Es demasiado hermosa - me dijo sonrojada-.
-Como tú -le respondí, sonriendo-.
-Isa, perdóname…
-¿Por qué?

Sin responderme, se acercó a mi y me besó, sentí una sensación nueva en todo mi ser, pero me agradaba, me gustaba sentir sus labios junto a los míos, y no sabia el porque .

-Por eso -respondió ella, muy apenada y nerviosa-.

No supe que decirle, y nos quedamos un momento en silencio, después sin saber el porque ya nos estábamos riéndonos mutuamente.

-Debo confesar que tiene los labios más suaves del mundo y muy dulces, ese labial rojo es demasiado tentador.

-Es mi favorito, con su peculiar sabor a cereza -le respondi-.

Ahí me di cuenta el porque nos habiamos reído, nos habíamos manchado ambas de mi labial, nos limpiamos y Joanne comenzó a poner la película.

No se que tiene, pero ha hecho que en estos instantes me sienta tan feliz, me hace sentir yo misma, es magia y no tengo ninguna duda al respecto.