Capitulo XI

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"Juntas podemos"

Íbamos las dos en el nuevo auto de Joanne, escuchando el cd nuevo de Lady Gaga, Chromatica. Mientras nos dirigíamos al bosque de los cerezos, estábamos cerca, le dije que quería que fuéramos a un lugar que le quería mostrar, y es donde mi mamá me llevo cuando cumplí 16 años, sentía la necesidad de ir ahí pero no quería ir sola.  

-Entonces, ¿es a un bosque donde vamos? -me preguntó ella sonriendo-.
-Si, ya casi llegamos es muy especial para mi -le respondí-
-Más me emociono al saberlo, me encanta todo lo que te haga feliz cariño, eres muy importante para mi -dijo ella sonrojada-.
-Eres muy tierna aunque lo niegues, ¿sabes?
-Nah, solo lo soy contigo y tal vez con mi hermana mayor -me respondió riéndose-.
-¿Hermana mayor? -pregunté admirada-.
-Sí, olvidé contarte que tengo una hermana, es presentadora de las noticias del espectáculo se llama Yaneth. Es muy simpática, me ha animado mucho, ha cuidado de mi a pesar de los altibajos de nuestra vida.
-Me encantaría conocerla, suena una persona interesante y pues es importante para ti.
-¡Claro! Yo te aviso cuando hacemos una salida juntas las tres, por cierto Isa, tengo una pregunta que hacerte más que eso es duda, si no te sientes bien para responderla esta bien, no hay presiones amor.
-Tú pregúntame amor, es importante que no nos guardemos nada.
-Bueno -dijo ella poniéndose seria-  Se que viste a Max cuando estábamos en el restaurante, y estabas asustada… ¿Por qué? ¿Te ha amenazado ese tipo? Sea lo que sea debes decirme, no estas sola, quiero ayudarte.
-Es que tengo miedo que nos haga daño, a las dos, como te conté tuve un pasado terrible, hice cosas, él sabe y la vez que llegó a mi oficina dijo que estaba mal de la cabeza por estar contigo, ni se como se enteró -le dije temblando un poco-.

Ella notó como me estaba poniendo de asustada, paro el auto, pauso la música y me tomo de las manos, luego me vio a los ojos y rápidamente mire hacia abajo.

-Mírame Isa, amor

Poco a poco fui dirigiendo la mirada hacia ella, mientras sentía que quería llorar.

-Todo va estar bien, si él intenta algo contra nosotras o contra ti, estamos juntas y nos vamos a permitir que se salga con la suya, necesito que cuando estés lista me cuentes más sobre lo que paso en el pasado, para saber más y a lo que nos enfrentamos.

-En serio no quiero que te haga daño Joanne, te amo, él es muy peligroso, astuto y manipulador.

-No tengo miedo de él, ese tipo debería temerme a mi, porque no sabe lo que soy capaz de hacer por las personas que amo, sobretodo por ti.
-Cuando lleguemos al bosque intentare contarte más, es un asunto que me da mucha ansiedad, me da pánico.
-Esta bien mi vida, vamos a seguir escuchando música -me dijo dulcemente y me dio un beso en la frente y siguió manejando-.

Estábamos casi a nada de llegar, cuando en la entrada habia un auto azul creo que era un mercedes benz, no me fije muy bien, estaba muy distraída en mis pensamientos en pensar en la conversación que tuve hace poco con mi novia, es que es tan difícil hablar de lo que paso en mi pasado en esos años con Max…

-Al parecer hay alguien más -dijo Joanne llamando mi atención, creo que notó lo ida que me encontraba en ese instante-.

-Supongo que es normal, es un lugar para turistas también, solo que hay lugares restringidos, sin embargo con mi mamá nos adentrábamos a esas zonas -respondí con una sonrisa-.

-Me encantaría conocer ahí, ¿iremos? -me preguntó ella con mucho interés y curiosidad-.
-Por supuesto, justamente es donde quiero mostrarte.
-Vaya, mi novia es una rebelde -dijo riéndose- ya pensabas llevarme al peligro ¿eh?
-¿Qué? No, es que… en serio quiero mostrarte algo -dije nerviosa-.
-Jajajajajaja, tranquila amor, solo bromeaba -dijo riéndose- en serio que me encantan tus expresiones, tú sonrisa, todo de ti.

Me sonroje mucho por lo último que dijo, jamás pensé que alguien me amaría tal como soy, con virtudes y defectos, creo que todos merecemos ser amados como somos, el amor es tan hermoso, pensé muy feliz por escuchar esas bellas palabras de parte de ella, la chica que amo.

Nos bajamos del auto luego de estacionarlo, nos tomamos de la mano mientras nos dirigíamos a la entrada, ella me hablaba sobre una idea que tenía para el trabajo.

-Perdona que te hable de esto, es solo que se me ocurrió de repente y no vaya ser que se me olvide luego.
-Tranquila manzanita, me encanta que me digas tus ideas sea de trabajo o no, es un placer escucharte para mi.
-Gracias por eso, siento lindo que sepas entenderme, ¿sabes?
-También pienso lo mismo mi amor.

A medida íbamos avanzando en el bosque, miraba a mi novia muy admirada y curiosa, creo que le estaba encantando mucho el lugar aunque solo habíamos recorrido un poco, aún faltaba para llegar a la zona donde estaba una vez con mi mamá, en verdad recordaré ese día con cariño, no se si fue imaginación pero se me hizo ver una mariposa mágica en aquella ocasión, siempre pensé que este lugar es muy misterioso y mis pensamientos aumentaron al saber que papá no le agradaría la idea que su esposa e hija estuvieran aquí. Pero ahora estoy muy decidida a saber más, a descubrir todos los secretos.

-¿En que piensas amor? -me preguntó ella muy curiosa-.
-Pienso que hay cosas que aún no entiendo de mi madre y quiero saber, sobre este bosque también, la última vez que estuvimos aquí me dijo que papá no debia saberlo.
-Lo descubriremos juntas -me dijo dándome un beso- tienes mi apoyo
-Sí, tienes razón, bueno eso suena que tendremos una aventura descubriendo secretos de mis padres -mencione riéndome-.
-Jajajajajajaja, esto ¡estará divertido! -exclamó alegremente Joanne-.
-Mucho diría yo, e interesante, quizás adquiramos alguna experiencia en el transcurso de nuestra aventura.
-Cierto, esto se pondrá aún más emocionante -dijo mi novia mientras en sus ojos se notaba la emoción-.

Seguimos caminando, mientras íbamos hablando sobre algunas hipótesis que teníamos sobre lo que pasaría, porque seria misterioso, desde cosas tan simples como una zona de miedo o mágica hasta las más locas ideas de que existe un mundo secreto escondido del exterior y así estábamos hablando, hasta que vi que llegamos a la zona restringida.

-Mira -le dije señalando un rotulo que decia “no entrar”- ahí vamos a entrar, no hay nadie cerca, así que no hay nada que temer.

Ella me siguió, nos metimos ahí, haciendo caso omiso a la advertencia, el lugar no habia cambiado se miraban los cerezos que empezaban a florecer, el aroma a rosas, habia un rosal que desprendía un olor muy fuerte, el sonido de las aves, todo era maravilloso, nada habia cambiado.

-¡Que lugar tan lindo! No entiendo porque han prohibido el paso aquí, sino lo hicieran, vinieran muchos turistas -dijo Joanne sorprendida de la belleza del lugar-.
-También pienso lo mismo, creo que los que cuidan de este lugar saben cosas.
-Misterio, ahí te vamos -menciono ella muy alegre con una vocecita imitando una entonación misteriosa-.

Se puso a observar el rosal, y de pronto vi una mariposa mágica cerca de ella, parecía como si le agradaba ver a Joanne.

-Amor -la llamé, ella me volteo a ver-.
-¿sí?
-¿Puedes ver esa mariposa que esta cerca de ti? Es azul y lanza polvitos, creo que le agradas.

Ella miraba a su alrededor, luego arriba, atrás, parecía como si no la notara, pero la mariposa seguía ahí.

-No, no veo nada, quizás se fue.
-A lo mejor -dije muy pensativa y confundida-.

¿Sera que solo yo la pude ver? ¿fue mi imaginación? Y así mi mente se llenaba de interrogantes, del porque la vi y ella no. Decidí creer que solo fue una ilusión, por el recuerdo grato con mi madre, volví a ver a donde estaba mi novia y ya no estaba la mariposa y entonces terminé confirmando que solo fue una ilusión mía.

Después fuimos a sentarnos cerca de unos girasoles, mientras la escuchaba a ella hablándome sobre su alegría de conocer un nuevo sitio, me contó que a su hermana le encantaría el lugar pero que respetaba mi escondite secreto, así llamo ella a esta zona restringida a donde nadie se supone que puede entrar, me di cuenta que no le he preguntado nada sobre su vida antes de conocerme, solo sabia que pronto se graduaría, trabaja conmigo, es muy buena en lo que hace profesionalmente, tiene una hermana, nose si vive con sus padres, las veces que fui la casa estaba sola, me daba cosita preguntarle sobre ello, quizás sea mejor que ella me cuente cuando lo desee, y sino pasa, no hay problema, he aprendido que lo importante es el presente, pero jamás descartare la posibilidad de algún día conocer más sobre ella, ver sus fotos de pequeña, adolescente, de solo imaginármela toda tímida en su primer día de clase en la primaria me reí un poco. 

-¿De que te ríes amor? -me pregunto ella-.
-Pues estas tan emocionada contándome sobre el lugar, y pues no se porque te imagine cuando eras pequeña, tú toda tímida entrando al aula de clases en la primaria.
-Ahhh -respondió ella riéndose- lo gracioso es que tienes razón, yo era muy tímida, incluso aún lo soy en la universidad -dijo riéndose-.
-Ah caray, que interesante ¿Qué te gustaba de pequeña? -pregunté sin pensar, casi le decia que ignorara mi pregunta, cuando vi que sonrió-.

-Me encantaba tomar leche con chocolate mientras estaba envuelta en una sabana de barney, viendo caricaturas con mi hermana, también salir a jugar con los vecinos, jugar con los carritos, es que jamás me gustaron las muñecas y mis papás respetaban eso, solía jugar a ser una heroína que salvaba a todos, amaba el olor de la pizza casera de mamá, ver a mi abuela tejer y contarme sus impresionantes historias de joven, como se enamoró del abuelo, tengo buenos recuerdos.

-Que hermoso todo lo que me cuentas amor, me encantaría enrollarme contigo en esa sabana, podemos ver caricaturas.

-¿En serio?
-Sí

-Aún tengo esa sabana, luego de aquí vamos a mi casa, la verdad lo habia pensado, pero que tú lo dijeras y se te ocurriera me hace confirmar que tenemos una maravillosa conexión.

-Es que así lo es -respondí besándola-.

Nos paramos y seguíamos hablando, ahora sobre los chismes de los empleados de la empresa, nos reíamos, hasta que llegamos cerca del río, en la orilla habia una placa de esas que tienen las personas que fallecen, nos acercamos y decía:

Andrew Mcmillan
1978- 2018
“Siempre fuiste un hombre maravilloso”

-Wow, jamás me imaginé a alguien enterrado acá, esto se pone más interesante.
-Ni yo manzanita, y pues esta raro

Me quede pensando… esa vez que vine con mamá, yo me quede sentada arreglando las cosas para guardarlas y ella me pidió que la esperara que quería bajar al río. Y en el tono que me lo dijo parecía importante…

-¿Qué paso cariño? -me preguntó mi novia-.

-Me siento un poco mal, podemos ir a tú casa amor -le respondí, en voz baja pero se que me escuchó-.

-Claro, cariño.

Volvimos afuera del bosque, nos subimos al auto y ahora ella puso música de Taylor Swift, mientras yo no dejaba de pensar en mi mamá y esa placa, no entendía nada, de repente sentí que me iba quedando dormida.


















































Isa & JoanneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora