El despertador comienza a sonar de forma molesta e incisiva, son las 6:30 de la mañana y debo prepararme para el trabajo. A pesar de no tener ningún motivo, he cerrado el ojo hasta casi las 3:00 de la madrugada, así que prácticamente no he dormido nada.
Apago el despertador, me incorporo y permanezco sentado en la cama unos minutos, sumido en mis pensamientos.
- Aquí voy de nuevo.
- Sí, aquí vamos. - Me respondía a mí mismo.
- De vuelta a la rutina, a hacer algo que odio, para sobre llevar una vida que no quiero.
- A levantarse ya, o se nos hará tarde igual que siempre.
Me levanté pues, caminé hasta el baño donde tomé una ducha, me aliste, iba refunfuñando porque tal y como me lo había vaticinado, de nuevo salía tarde de casa.
La puerta se cerró, el departamento había quedado en silencio. De pronto, el despertador comienza a sonar de forma molesta e incisiva...
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De la vida y otros males.
Short StoryUn retrato literal del día a día en la vida real.
