-Creo que no hace falta decirte que sólo te quedan dos días para que termine la semana-Me dijo haciendo una mueca. Molly había progresado conmigo, es decir, no creo que alguien le comparta su auricular mas de una vez a alguien con el cual no tiene confianza. No habíamos prestado atención alguna ya que el profesor se pasó explicando el mismo tema de siempre para los que todavía no entendían.
-Creo que te equivocas, me quedan cuatro. Sábado y Domingo cuentan.
-¿Qué es lo que tienes en mente?-
-¿Te gusta el café?
-Si.
-Bueno igual no es lo que vamos a comer. Te invito a mi casa, puedes decirle a tu mamá que estás haciendo un trabajo con un compañero.
-No se si es buena idea.
-Para mi sí. Pasame tu teléfono.
-No hace falta avisarle, está bien.
-¿Segura? Yo creo que deberías. Podría preocuparse mucho.
-No importa. Asepto ir.
Sonreí y pensé en agarrarle o no la man. Decidí por no, no creo que le guste.
Al llegar a casa ella se quedó quieta en una esquina mientras me miraba. Estaba nerviosa. Se notaba.
-Hey, siéntete como en casa, no te quedes hay quieta.
Molly estaba nerviosa, podía notarlo. Aunque creo que cualquier chica hubiera estado nerviosa si fuese como ella o sólo por el hecho de estar en la casa de un chico al cuál sólo conoces hace menos de una semana.
De cualquier forma, quería que ese nerviosismo ya no estuviera presente.
-¿Quieres jugar algún videojuego?-Sé que era medio absurdo preguntarle eso a una chica, pero creo que es una buena táctica para una conversación.
-Dijiste que íbamos a comer algo.
-Podemos pensar en comida en otro momento, además no creo que vaya a ser la última vez que vengas.
Mueca. Miró a los costados. Asintió mirándome.
Agarré los mandos y le dejé un gran estuche con todos los videojuegos que tenía. Ella empezó a ojearlos mientras los iba pasando. Me dio un disco y al verlo, dirigir mi mirada hacia ella.
-¿Resident Evil 5?-Le sonreí. Seguramente no tenía ni idea de lo que se trataba el juego.
-Hutch lo juega aveces.
-¿Hutch? ¿Quién es Hutch?-Ella al darse cuenta de lo que había dicho, hizo una mueca y miro el control remoto.
-No importa.
-¿Es el chico de la otra vez, no?
-Dije que no importa.
-No vamos a jugar hasta que me digas quien es Hutch.
-Él-Suspiró mientras seguía sin mirarme-es solo un amigo.
-Mientes. Te gusta Hutch-Eso era lo más lógico que podía sacar frente a su reacción al hablar de él y cómo actuaba enfrenta él-¿Por que no viene al colegio?
-Es menor, sigue en secundaria.
-¿Te gusta un chico de secundaria? Eso no es bueno...
-¡NO ME GUSTA HUTCH! ¡DEJA DE DECIR ESO!-Me sorprendí, Molly acabo de gritarme. Yo nunca le hubiera gritado a alguien si no tenía la confianza suficiente para hacerlo.
